Internacional

Derrotar a Hizbulá sería una tarea muy difícil para Israel: "No podrá lograrlo plenamente"

El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, ha dejado entrever que no tiene suficiente con la guerra en Gaza ni con las protestas internas que exigen su dimisión, e incluso ha amenazado con ampliar el conflicto al Líbano contra el movimiento islamista Hizbulá. Un analista político libanés explica a Sputnik por qué eso es una mala idea.
Lea en Sputnik
Israel está preparado para una "acción extremadamente poderosa" en el norte contra Hizbulá, advirtió hace unos días Netanyahu, citando la reciente y dramática escalada de escaramuzas transfronterizas, que han incluido ataques de drones de Hizbulá dentro de Israel y el derribo de un dron israelí pesado sobre el espacio aéreo libanés.
"Cualquiera que piense que puede hacernos daño y que nos quedaremos de brazos cruzados, está muy equivocado", aseguró Netanyahu, en declaraciones a los medios en la ciudad de Kiryat Shmona, en el norte de Israel, que ha sido evacuada de la mayor parte de su población civil en medio de los combates.
"Irán está intentando asfixiarnos y rodearnos, y nosotros estamos contratacando directamente y con sus representantes. No podemos aceptar que continúe la situación en el norte, no continuará. Devolveremos a los residentes a sus hogares y devolveremos la seguridad", dijo Netanyahu, en referencia a la alianza del Eje de la Resistencia Islámica liderada por Irán, que incluye a Hizbulá en el Líbano, Siria, las milicias chiíes iraquíes y los combatientes hutíes de Yemen.
Defensa
Israel habría usado municiones de EEUU en ataque contra escuela en Gaza
La Radio del Ejército israelí informó esta semana que Tel Aviv había aprobado la llamada a filas de 50.000 reservistas adicionales debido a una posible escalada con Hizbulá. Los medios de comunicación estadounidenses y de Oriente Medio se han preparado para un conflicto total entre Israel y la milicia libanesa.
Pero por muchas similitudes superficiales que puedan parecer entre Hizbulá y el grupo militante palestino Hamás —que ha conseguido empantanar al Ejército israelí utilizando una combinación espartana de rifles, misiles antitanque portátiles y simples cohetes ensamblados en garajes subterráneos—, los observadores políticos y militares de todo el mundo coinciden en que el grupo libanés es mucho, mucho más fuerte.
Hizbulá, a diferencia de Hamás, se ha endurecido tras años de batallas contra el Ejército israelí y contra los terroristas patrocinados por Estados Unidos en Siria a partir de 2012 y también tiene acceso a un arsenal de misiles y cohetes sofisticados, que los observadores de Washington estiman en 200.000, suficientes para desbordar la poderosa red de defensa antiaérea y antimisiles de Israel.

"Israel ha amenazado con iniciar una operación militar en la frontera con el Líbano porque Hizbulá ha estado demostrando una creciente sofisticación y sorprendentes capacidades, lo que ha llevado a Israel a una creciente inquietud y confusión sobre las expectativas en el frente norte", dijo a Sputnik el doctor Imad Salamey, profesor asociado de Ciencias Políticas y Asuntos Internacionales en la Universidad Libanesa Americana.

Defensa
Hizbulá confirma la muerte de uno de sus jefes en un ataque israelí

Derrotar a Hizbulá no sería tarea fácil

Israel puede atacar muchos objetivos de Hizbulá a la vez y causar daños significativos, pero no puede eliminar o incluso reducir drásticamente las capacidades de la milicia, "que están muy extendidas y son móviles", señaló el analista.

"Si Israel pretende debilitar seriamente a Hizbulá, ello implicaría muchos años de operaciones para destruir infraestructuras y armas, expulsar a los combatientes del sur y cortar las rutas de suministro desde Siria. Israel no podrá lograrlo plenamente", subrayó Salamey.

Además de eso, el académico advirtió que "la amenaza de desbordamiento es bastante alta, implicando potencialmente a gran parte de la Brigada Quds en Siria e Irak, dando lugar a que Israel luche en múltiples y amplios frentes".
Ese no es el resultado que Tel Aviv esperaría, según Salamey, ya que los funcionarios israelíes y los líderes militares suelen buscar "un logro militar rápido con objetivos ambiciosos", lo que si fracasa, lleva a las fuerzas israelíes a recurrir al "castigo colectivo dirigido contra civiles, que es el escenario más probable en este caso".

"El posible conflicto se saldará con importantes pérdidas en ambos bandos sin que se produzca una victoria decisiva. Sin embargo, Irán saldrá probablemente como gran vencedor, reafirmando su papel regional en cualquier futuro acuerdo político", observó Salamey.

Defensa
La Cúpula de Hierro de Israel podría verse rebasada en caso de un ataque de Hizbulá
Hizbulá e Israel libraron su última gran guerra en julio-agosto de 2006, durante la cual las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) arrasaron gran parte de la infraestructura de Beirut y causaron hasta 5.000 millones de dólares en daños directos de guerra y pérdidas de producción e ingresos.
Sin embargo, Hizbulá salió prácticamente indemne: unos 1.000 de sus combatientes se enfrentaron a entre 10.000 y 30.000 soldados israelíes en el sur de Líbano, perdieron unos 250 hombres y mataron a 121 soldados israelíes e hirieron a más de 1.200. El conflicto se ha catalogado incluso como una guerra civil y ha sido descrito por los principales analistas occidentales como una derrota para Israel, por lo que se dice que las fuerzas armadas israelíes sufrieron una "herida sangrante" y unos costes de reputación de los que Tel Aviv ha sido incapaz de recuperarse hasta el día de hoy.
No te pierdas las noticias más importantes

Suscríbete a nuestros canales de Telegram a través de estos enlaces.

Ya que la aplicación Sputnik está bloqueada en el extranjero, en este enlace puedes descargarla e instalarla en tu dispositivo móvil (¡solo para Android!).

También tenemos una cuenta en la red social rusa VK.

Discutir