La autora considera que, a pesar de que la reunión se realizará en Hiroshima como un símbolo de la renovación, "la alineación familiar del G7 de este año parece más una reliquia de la posguerra que el grupo de trabajo para el futuro que pretende ser".
"China ha incrementado que se sienta no solo como una potencia económica regional, sino también global. Más allá de Occidente, su Iniciativa de la Franja y la Ruta es respetada y abiertamente bienvenida. Una desventaja es el riesgo de deuda y la dependencia económica, así como la falta de nuevos empleos, porque los contratistas chinos llevan su propia fuerza de trabajo. La ventaja para muchos es la construcción rápida de infraestructura sin ninguna atadura ideológica", argumenta la periodista.

"Los ataques diplomáticos se puede enterrar. Los comunicados cubren toda clase de desacuerdos y los que emanen este año del G7 no serán la excepción. Pero las verdaderas diferencias en intereses nacionales que los dos temas del momento exponen —es decir, el ascenso de China y la guerra en Ucrania— sugieren que, en Hiroshima, el estatus del G7 como cualquier tipo de agrupación útil pueden estar llegando a su final", concluye la autora.
Suscríbete a nuestros canales de Telegram a través de estos enlaces.
Ya que la aplicación Sputnik está bloqueada en el extranjero, en este enlace puedes descargarla e instalarla en tu dispositivo móvil (¡solo para Android!).
También tenemos una cuenta en la red social rusa VK.