En vísperas de las elecciones parlamentarias del 25 de septiembre en Italia, el exministro del Interior y líder del partido Liga, Matteo Salvini habló sobre la crisis energética, la declaración de autocracia de Hungría y las sanciones antirrusas. Según los últimos sondeos, una coalición liderada por el partido nacionalista Hermanos de Italia y Forza Italia, que también incluye a Liga, ganaría las elecciones. Sin embargo, las posiciones de los partidos de la coalición difieren en una serie de cuestiones.
Salvini considera en su país no hay consenso sobre las sanciones antirrusas. Aunque Meloni, que es la principal aspirante a primer ministro de Italia, apoya las medidas restrictivas contra Rusia, Salvini las califica de ineficaces.
"He dicho que sí, que las hemos aprobado. Pero, ¿quién las paga? Los trabajadores italianos de nuevo. Así que pido a la UE que los proteja también. ¿Quiere mantener sanciones ineficaces?", se pregunta Salvini, señalando que él no cree que hayan detenido el conflicto. En una entrevista a El País, el político añadió que los trabajadores italianos no pueden pagar esas medidas restrictivas.
Otra cuestión en la que la coalición no está de acuerdo es la decisión del Parlamento Europeo de reconocer a Hungría como una autocracia electoral. Salvini, al igual que la líder del partido Hermanos de Italia, Giorgia Meloni, votó en contra de dicha medida, mientras que Forza Italia apoyó la iniciativa. Salvini explicó su decisión por el hecho de que está en contra de la "injerencia de países extranjeros en los asuntos italianos".
"A pesar de que a las fuerzas de centro-izquierda en Europa no les gusta el primer ministro húngaro Viktor Orban, los húngaros le votaron en las elecciones y su elección debe ser respetada".
"No entiendo por qué la UE, en lugar de preocuparse por la electricidad, el gas y la inmigración, debe preocuparse por las normas de otros países", dijo el político.
Salvini también se pronunció contra la Europa que ve ahora, en la que, a pesar de un periodo de cohesión durante la pandemia, a causa del "problema del gas" "cada uno vuelve a ir por su lado". Europa, dijo, debe ser para los ciudadanos "una unión de los que son diferentes pero que respetan los países individuales". "Y hoy Europa no respeta lo suficiente a Italia", concluyó.