"La Conaie saluda al hermano pueblo boliviano y reconoce su triunfo contundente en las elecciones generales de este domingo 18 de octubre que, tras un año de estar gobernado por las élites económicas y la derecha boliviana (…) ha decidido el inicio de una nueva etapa", dijo la Conaie en un comunicado.
La institución añadió que el pueblo boliviano se dispone a profundizar su revolución desde las bases, por lo que hizo un llamado a consolidar una verdadera unidad latinoamericana que se enfoque en la realización de proyectos políticos comunes y que profundice cambios reales, por el respeto a la vida, los derechos humanos, la libre determinación y autonomía de los Estados y de los pueblos indígenas.
De acuerdo con datos preliminares, el candidato presidencial del MAS, Luis Arce, habría ganado en primera vuelta con el 52,4% de los votos, seguido por Carlos Mesa, de Comunidad Ciudadana (CC), con el 31,5%, y en tercer puesto Luis Fernando Camacho, de Creemos, con el 14,1%.
Según la Conaie, en el último año la derecha boliviana "se enquistó en el poder después de montar un supuesto fraude electoral y consiguiente golpe de Estado auspiciado por Washington y la OEA y dirigida por las políticas intervencionistas del FMI".
La Conaie añadió que la voluntad expresada en las urnas evidencia que en Bolivia gobernó por un año una dictadura, a la que calificó de violenta y represora, al mando de Jeanine Áñez y avalada por la Organización de Estados Americanos (OEA).
El movimiento indígena ecuatoriano también conminó a los bolivianos a mantener una crítica permanente en torno al modelo político denominado Socialismo del Siglo XXI.
Dicho modelo, sostuvo la Conaie, se ha implementado en Latinoamérica absorbiendo y, en muchos casos, desmovilizando las luchas históricas de los pueblos, pero sin lograr verdaderas transformaciones estructurales en las sociedades.
Los procesos históricos los construyen los pueblos, subrayó el comunicado.