"Se adelantó la operación Santa Ana, donde fueron capturados delincuentes en nuestro país que estaban tratando de estructurar operaciones de desestabilización; personas provenientes de Venezuela y presuntamente promovidas y financiadas por el régimen (...) de Nicolás Maduro", dijo el mandatario en declaraciones difundidas por la Presidencia de Colombia.
Según Duque, "estas personas estaban en operaciones de inteligencia" y las autoridades han comprobado "su intención criminal", por lo que "serán puestas a disposición de la justicia".
"La captura de estas personas obedece a la participación y conformación de grupos militares venezolanos en territorio colombiano, con el fin de realizar un entrenamiento para actividades ilícitas", precisó Atehortúa.
Inicio de investigación
El oficial detalló que la investigación inició a raíz de la detección de un armamento en la carretera que comunica las ciudades de Barranquilla y Santa Marta (norte) el 23 de marzo, en la que las autoridades incautaron 26 fusiles, binoculares, radios de comunicación, visores nocturnos, 23 miras para fusil, 30 unidades de miras láser, silenciadores, entre otros elementos.
Los capturados fueron identificados como Yacsi Alexandra Álvarez, Rayder Alexander Russo y los hermanos Juvenal y José Sequea Torres.
"(La) ciudadana venezolana Yacsi Alexandra Álvarez, que fue objeto de investigación rigurosa (...), era la encargada logísticamente de la organización y de generar contactos internacionales con la intención de comprar armamento y realizar operaciones que fueron fallidas contra el Estado colombiano", dijo Atehortúa.
Asimismo, aseguró que era la intérprete del exgeneral venezolano Cliver Alcalá, quien residía en Barranquilla y en marzo se entregó ante la Administración de Control de Drogas (DEA, por su sigla en inglés) de Estados Unidos.
Operación Gedeón
La mujer también sería la intérprete del estadounidense Jordan Goudreau "para las coordinaciones de compra de armamento y el entrenamiento de militares venezolanos" en Colombia, añadió el funcionario.
Atehortúa aseveró que "las labores de inteligencia permitieron establecer que durante un año, aproximadamente, estos ciudadanos venezolanos estarían conformando grupos militares desertores en Colombia para realizar actividades de desestabilización a los diferentes organismos del Estado colombiano".
Además, dijo, buscaban tener contacto con miembros de la inteligencia colombiana y de esta forma "obtener información reservada que era enviada hacia el país vecino".
Por último señaló que los detenidos "estaban nutriéndose y auspiciándose con recursos que provenían de actividades ilícitas desde el extranjero".
Declaraciones confusas
Más temprano, el diario local El Tiempo informó sobre la detención de los venezolanos tras acceder a un informe de inteligencia.
El reporte indica que los cuatro detenidos coordinaron la "Operación Gedeón" para derrocar a Maduro, información que se contradice con la aseveración de Duque de que eran financiados por la administración chavista.
Al día siguiente, los cuerpos de seguridad de Venezuela detectaron una segunda lancha también con armas, en la que fueron detenidas ocho personas, entre ellas dos estadounidenses y militares venezolanos desertores.
Las autoridades locales detuvieron a más de 40 personas en varias zonas del país por su presunta implicación en ese hecho.
Según se conoció, el objetivo era sustraer a líderes de la administración venezolana, entre ellos el propio Maduro, para enviarlos a EEUU y ser procesados por supuesto narcotráfico y apoyo a grupos terroristas.
El Gobierno de Venezuela señaló directamente a la exfiscal general de ese país Luisa Ortega Díaz y al diputado opositor Hernán Alemán -quien falleció en Colombia el pasado 7 de julio- de formar parte de la "acción mercenaria", de la cual también culpa a la administración del presidente Iván Duque, que niega todo vínculo con la Operación Gedeón.