Los insectos ingresaron "a la provincia de Corrientes, donde se encuentra actualmente y en cercanías a la provincia de Entre Ríos", informó el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa).
Desde allí se trasladó hasta las provincias de Chaco (norte) y Santa Fe (centro-este), hasta que el 19 de junio la manga cruzó el Río Paraná e ingresó en la provincia de Corrientes (noreste), donde se encuentra en la actualidad.
La plaga de langostas ya ha recorrido más de un millar de kilómetros desde Paraguay, sin que de momento haya dañado cosechas en el país sudamericano.
"La langosta es una plaga migratoria, que no reconoce límites ni fronteras y, puede, en un día, trasladarse hasta 150 kilómetros y, por ejemplo, cruzar de una provincia a otra, o incluso de un país a otro en muy pocas horas", advirtió el organismo.
El Senasa, bajo la órbida del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca, controla la manga desde el 11 de mayo, cuando se recibió la primera alerta por parte de Paraguay.
"Es necesario destacar que es un insecto que no afecta a la salud de las personas ni de los animales, ya que solo se alimenta de material vegetal y no es vector de ningún tipo de enfermedad", observó el Ministerio de Agricultura.
Ademaś de realizar una vigilancia permanente de la plaga, el Senasa se encuentra en contacto con Bolivia y Paraguay a través del Plan Regional de Manejo de la langosta a fin de mejorar la detección y control de la manga para no recibir nuevas invasiones.