"Los estados miembros [de la OEA] perdieron su reciente crecimiento económico y ahora están viendo contracciones del 30%", indicó Almagro, citando proyecciones de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) y el Fondo Monetario Internacional.
La Comisión Económica de las Naciones Unidas para América Latina y el Caribe (CEPAL) advirtió en un reciente informe sobre una pandemia de hambre pendiente en la región debido a la caída de los ingresos y al aumento de los precios de los alimentos como resultado de la crisis generada por el nuevo coronavirus.
El informe predijo que las nuevas medidas para frenar la enfermedad respiratoria COVID-19, causada por el coronavirus, llevarían a otros 16 millones de personas más a la pobreza extrema este año, en una región donde casi 54 millones ya experimentaban inseguridad alimentaria severa.