Sus apariciones en las conferencias matutinas del presidente Andrés Manuel López Obrador para explicar la crisis de desabasto de medicamentos le abrieron el paso para que, una vez detectados los primeros casos de coronavirus en México, López-Gatell se convirtiera en el vocero del Gobierno y anunciara las principales medidas sanitarias para enfrentar la pandemia.
La conversión de un problema sanitario en parte de la agenda política pudo anticipar este movimiento. Después de todo, en la mayor parte de los países la expansión del nuevo coronavirus ha servido también para las carencias de los sistemas de salud, así como para fortalecer las posturas en contra de algunos gobiernos.
En América Latina, la crisis sanitaria ocurre "en un momento de profunda debilidad de la mayoría de los gobiernos de la región que no han conseguido encauzar, de forma adecuada, en los años recientes, las demandas sociales de las clases medias emergentes. Y no lo han hecho, precisamente, en una de las áreas que se va a poner más a prueba en esta crisis: los servicios públicos, especialmente el sanitario", sre afirma en el análisis El COVID-19 en América Latina: desafíos políticos, retos para los sistemas sanitarios e incertidumbre política, elaborado por el Real Instituto Elcano en España.
Es probable que las dificultades técnicas sobre la pandemia llevaran a que la estrategia de comunicación del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador recurriera a un personaje que podría identificarse como especialista en el rubro. López-Gatell, después de todo, es un funcionario que conoce de la política sanitaria mexicana, además de estar formado como médico cirujano y doctorado en epidemiología por la Universidad de Johns Hopkins.
Esta realidad ha salido a relucir cada vez que se avivan los cuestionamientos al protagonismo asumido por el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud. López Obrador, por ejemplo, ha señalado que "López-Gatell es una gente con mucha preparación. Es un científico que, además, es un hombre responsable y honesto", a quien tiene "toda la confianza".
Pese a todo, López-Gatell se mantiene como la voz principal del Gobierno sobre el tema de la pandemia. Probablemente, en este caso la aparente buena fe del secretario también ha jugado un papel clave. El subsecretario se ha convertido en objeto de interés de revistas del corazón, e incluso en protagonista de notas que ahondan sobre su pasado como músico.
Incluso, algunas personas han aprovechado el momento para compartir memes y otros mensajes de apoyo al funcionario. Así, por ejemplo, un niño de 9 años, de Malinalco, inventó superhéroe con Hugo López-Gatell. Tiene un par de pistolas que lanzan gel antibacterial.
Una encuesta elaborada por Mitofsky destaca que 57.5% de los mexicanos evalúa el trabajo de López-Gatell como bueno, percepción que sólo está por debajo de la opinión general sobre los médicos y los hospitales privados.
Así pues, la luna de miel de la opinión pública con López-Gatell puede explicar que, en los últimos días, él sea quien se encarga de anunciar medidas como la clausura de los negocios no esenciales que mantengan labores durante la jornada de sana distancia. Esta percepción, después de todo, también puede ser un factor clave para que el Gobierno logre mantener el respaldo popular de cara a la elección intermedia de 2021.