El anuncio llega después de los informes sobre los 29 militares turcos muertos resultado de un ataque aéreo en el Idlib sirio.
"La política migratoria de Turquía permanece inalterada, pero ya no puede frenar el flujo de refugiados de Siria", informó la agencia Anadolu citando a Celik.
El ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, había comentado que Turquía no cumplió varios compromisos clave para resolver la situación en torno a Idlib.
En particular, Turquía no logró separar a la oposición armada —dispuesta a dialogar con Damasco en el ámbito del proceso político— de los terroristas que actúan en Siria.
Turquía informó de una quincena de efectivos fallecidos por los ataques del Ejército sirio, y estimó en más de un centenar las bajas del otro bando, sin que Damasco haya confirmado hasta ahora la muerte de sus militares.
Ankara exige la retirada de las tropas sirias de Idlib, amenazando con lanzar una operación militar en esa provincia, mientras Damasco considera que la presencia turca en la región vulnera su soberanía.