"Abogamos por las soluciones que el país necesita: fin de la violencia, la violencia no es aceptable en ninguna forma y, sobre todo, no es aceptable con la intención de un cambio violento en el régimen democrático establecido", publicó el diplomático uruguayo en su cuenta de la red social Twitter.
Almagro se pronunció a propósito del reciente enfrentamiento a tiros entre policías y militares en el centro de Puerto Príncipe, capital de Haití, que dejaron un agente y un soldado muertos, una decena de heridos y empeoró la tensión social en la nación caribeña.
El tiroteo entre policías y militares en las inmediaciones del Campo de Marte llevó al Gobierno a ordenar la cancelación del Carnaval de Puerto Príncipe, mientras persiste el cierre de comercios y de calles, así como los prolongados cortes de energía eléctrica.
Varias de las principales calles de Puerto Príncipe están bloqueadas por barricadas montadas por grupos que apoyan las reivindicaciones de la Policía Nacional de Haití (PNH), que se manifiesta desde la semana pasada en reclamo de mejoras laborales y la creación de un sindicato.
"Llamamos a la población a estar alerta y ser inteligente en estos momentos convulsos. En ningún caso, se puede permitir una explotación trivial de las reivindicaciones de la Policía Nacional de Haití, ni justificar estas acciones violentas", instó el Ministerio en un comunicado.
Una ronda de conversaciones, celebradas a finales de enero último en la Nunciatura Apostólica, fracasó luego de tres días, debido a la falta de consenso sobre la gobernanza y el tiempo que debía permanecer en el poder el presidente.
Haití está sin primer ministro desde julio pasado y sin Congreso desde enero último, en tanto la situación económica no mejora, pese a las medidas adoptadas por el Ejecutivo para reducir el gasto estatal y el déficit presupuestario.