"Las autoridades golpistas bolivianas no deberían hacer recaer sobre Cuba la responsabilidad por su decisión de suspender las relaciones diplomáticas entre ambos países. La hostilidad y las ofensas no han emanado de nuestro Gobierno ni de nuestro pueblo", expresa la declaración, publicada en el sitio web del MINREX.
El documento precisa que Cuba "ha actuado con paciencia y prudencia, en defensa y protección de sus nacionales y ha evitado la confrontación a pesar de la actuación reprochable de los golpistas".
Dos días antes, el canciller cubano calificó de "vulgares mentiras", las afirmaciones de Áñez, quien intentó desacreditar a los integrantes de la brigada médica cubana que laboró durante 13 años en Bolivia.
La declaración del MINREX subraya que después de la renuncia del expresidente boliviano Evo Morales y la autoproclamación presidencial de Áñez, "miembros del Gobierno de facto de ese país desarrollaron acciones sistemáticas para deteriorar y entorpecer las relaciones bilaterales con Cuba (…) desplegaron una feroz campaña de mentiras y tergiversaciones contra Cuba, en particular contra la cooperación médica cubana".
Estas campañas, según la nota, "incitó públicamente a la violencia contra nuestro personal de la salud e incluyó allanamientos y registros brutales, ilegales e injustificados, acusaciones falsas y detenciones de colaboradores cubanos".
Entre el 15 y el 20 de noviembre, de forma unilateral, la Cancillería actuante retiró a todo el personal diplomático boliviano acreditado en Cuba.
La declaración expresa además que la Ministra de Comunicación boliviana emitió calumniosas declaraciones contra el personal diplomático cubano y sus familiares, "que incluyeron ofensas al Embajador cubano y la peregrina acusación de que su esposa organizó manifestaciones y la resistencia al Golpe, cuando ésta nunca ha visitado ese país".
Menciona también el mensaje presidencial a la Nación del Estado Plurinacional de Bolivia, emitido por Áñez el pasado 22 de enero, en el que se refirió "ofensivamente" a los médicos cubanos.
"De manera calumniosa", enfatiza la nota del MINREX, "en este mensaje se afirma que el 80% de los fondos de la Brigada Médica de Cuba en Bolivia se transferían a nuestro país (Cuba) "para financiar el castro-comunismo que tiene sometido y esclavizado a su pueblo".
El Gobierno cubano asegura que "el dinero devengado por la brigada médica cubana en Bolivia no se transfirió nunca a Cuba y se utilizaba para cubrir los gastos de los colaboradores en ese país".
Durante los 13 años de presencia de la brigada médica cubana en Bolivia se ofrecieron 77.330.447 consultas, se realizaron 1.529.301 intervenciones quirúrgicas, se asistieron 60.640 partos, se aplicaron 22.221 vacunas y se hicieron 508.403 cirugías oftalmológicas, según cifras ofrecidas por las autoridades de la isla.
El documento aclara además que desde el año 2006 hasta el año 2012, Cuba asumió todos los gastos de la cooperación con Bolivia por valor de más de 200 millones de dólares anuales, lo que incluyó equipamiento médico, medicamentos, insumos y material gastable, sostenibilidad de la brigada cubana, la transportación aérea de los colaboradores y los gastos en equipos médicos.
A su vez, la declaración del MINREX vincula la decisión del Gobierno transitorio de Bolivia de romper relaciones diplomáticas con Cuba a contactos previos entre funcionarios de ese país suramericano y de Estados Unidos.
Estos encuentros de Longaric en Washington fueron precedidos por una reunión con el secretario de Estado norteamericano, Mike Pompeo, también calificado en la isla como "uno de los halcones de la política exterior de la Casa Blanca" contra Cuba.
Por su parte, la presidenta interina de Bolivia, Jeanine Añez, se reunió hace dos días en La Paz con el subsecretario de Estado para Asuntos Políticos, David Hale, aunque de ese encuentro solo trascendió que se conversó sobre las relaciones bilaterales y la acreditación de un nuevo embajador norteamericano en Bolivia.