Rigoberto Senarega, director de fotografía y con más de tres décadas de vinculación al cine cubano, comentó a Sputnik que este hecho ocurrido hace 123 años, "es un reflejo del vanguardismo que ha caracterizado a Cuba, y que ha puesto a esta pequeña isla en el centro de la mira de los grandes inventores alrededor del mundo".
"Cuba y los cubanos han sido siempre un punto de extrema curiosidad por conocer los principales inventos en el mundo —agregó Senarega—, entre ellos el cine (1897), el ferrocarril (1837), el teléfono (1881), la televisión (1952), que convirtieron a la isla en uno de los primeros países de América Latina y el mundo en conocerlos".
Según los historiadores del cine en Cuba, el francés Veyré llegó a La Habana el 15 de enero de 1897, donde alquiló un local con varias docenas de sillas, y ocho días después —el 23 de enero— organizó un espectáculo cinematográfico —el primero en Cuba— dirigido a las autoridades locales y la prensa.
También se exhibieron dos cortos filmados en España, "Infantería española en vivac" (1896), y "Artillería española en combate".
Gabriel Veyre aprovechó su estancia en Cuba y filmó lo que sería la primera película cubana —Simulacro de Incendio— donde participaron los Bomberos del Comercio de La Habana.
Un año después, en 1898, el cubano Jesús Esteban Casasús, filmaría el primer corto enteramente nacional, titulado "El brujo desaparecido", que promocionaba una casa productora de cerveza.
"Ahora mismo —agregó— recién estamos estrenando una ley que protege al creador independiente —Decreto Ley No. 373 "del Creador Audiovisual y Cinematográfico Independiente", aprobado el 25 de marzo de 2019— que sigue abriendo las puertas a la democratización del cine en nuestro país, que ya sucedía de manera paralela a la industria pero sin amparo legal".
En el último Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano, realizado en diciembre en Cuba, participaron más de 300 películas de 37 países.