"Nos puede suceder un ajuste fiscal salvaje, que rompa la estabilidad lograda (...) La región está temblando, cruje, se mueve por decisiones drásticas de gobiernos parecidos a lo que piensa Lacalle", dijo Martínez en un video difundido en redes sociales.
Uruguay celebró la primera vuelta de sus elecciones nacionales el 27 de octubre, en las que el FA obtuvo 39,17% de los votos y el PN recibió 28,59% de los sufragios.
El balotaje se celebrará el 24 de noviembre entre Martínez y Lacalle Pou.
Martínez aseveró que Lacalle desconoce los logros del actual Gobierno y que si llega al poder gobernará por decreto, haciendo "sufrir" al pueblo.
"Gobiernos que aumentan las cosas por decreto, que hacen sufrir, que te quitan cosas y que a muy poquitos no los tocan. Eso pasó mucho tiempo en Uruguay (...) en cambio, en estos 15 años se construyó tranquilidad, crecimiento, predictibilidad y certeza", agregó.
En abril, Lacalle Pou, hijo del expresidente Luis Alberto Lacalle (1990-1995), presentó su programa de Gobierno y habló de aplicar un "shock de austeridad", ya que el "déficit fiscal no es sostenible".
Por su parte, Martínez expresó que le preocupa que "viejos apellidos" protagonicen la política de Uruguay.
"Son estos apellidos los que nos llevaron a la crisis del 2002. Por eso yo también estoy generando alianzas, pero no entre cuatro paredes, sino con la gente, no con cúpulas que representan el peor momento del pasado", afirmó Martínez.
Sostuvo que el resultado de las elecciones del 27 de octubre fue un mensaje que él supo escuchar.
"Cada elección es un aprendizaje. En la vida siempre hay que aprender de todo. Yo he aprendido del error y de mi propia experiencia. Esta elección ha sido para nosotros una enseñanza. La humildad es fundamental. Me reclamaron más firmeza y claridad para que quede claro las cosas que nos pueden suceder en estos cinco años", agregó.
No obstante, los comicios de noviembre se le presentan como los más difíciles, producto del desgaste propio de 15 años en el Gobierno y porque los indicadores económicos y de seguridad, entre otros, no son los mejores.