El Código Civil argentino de 1869 declaraba a la mujer legalmente incapaz, colocada en un plano infantil. Sin consentimiento de su esposo, la mujer casada no tenía derecho a la educación formal, fijar domicilio ni encarar actividades comerciales.
"La primera lucha de las feministas argentinas, principalmente socialistas y anarquistas, fue por los derechos cívicos, que a veces se confunden con los derechos políticos. Primero había que lograr la igualdad legal", contó a Sputnik el historiador Felipe Pigna, autor de varios libros de divulgación sobre el rol de las mujeres en el devenir político y social nacional y de la región.
Cecilia Grierson (1859-1934)
Primera mujer en graduarse y ejercer como médica en el país, Cecilia Grierson fundó la Sociedad Argentina de Primeros Auxilios y creó la primera escuela de enfermeras de la región. Nunca la dejaron operar como cirujana ni dar cátedra en la universidad. Fundó el Consejo Nacional de Mujeres en 1900 y presidió el Primer Congreso Feminista Internacional en 1910.
Su lucha y la publicación de sus estudios críticos sobre el Código Civil fueron claves para la sanción de la Ley 11.357 sobre la Capacidad Civil de la Mujer, con la que las mujeres argentinas alcanzaron la igualdad legal con los varones, aunque sin incluir la patria potestad compartida ni el derecho al voto.
Julieta Lanteri (1873-1932)
Fue la quinta mujer en recibirse como médica en el país. Julieta Lanteri fundó el Partido Feminista Nacional y, junto a Grierson, la Asociación Universitaria Argentina. Inmigrante italiana, al obtener la ciudadanía argentina se dio cuenta de que no existía ningún impedimento legal que la impidiera votar, por lo que recurrió a un juez, quien le permitió emitir su voto en 1911. Así, se transformó en la primera mujer en poder votar en Argentina.
Alicia Moreau (1885-1986)
Fue una de las principales referentes del socialismo, la primera mujer en ocupar un cargo político y una ferviente luchadora por los derechos de la mujer. Desde muy joven fue fundadora del Centro Socialista Feminista, la Unión Gremial Femenina, el Movimiento Feminista y la Unión Feminista nacional.
En 1932, elaboró un proyecto de ley de sufragio femenino, presentado por el diputado Mario Bravo, aprobado por la Cámara Baja pero rechazado por los senadores, mayormente conservadores. Después del golpe de Estado que inaugura la llamada Década Infame (1930-1943), todo intento de lucha social fue sofocado por el régimen dictatorial.
Eva Duarte (1919-1952)
Reconocida referente social, la emblemática Primera Dama de Argentina "Evita Perón" fue nexo entre el presidente y el sindicalismo, además de coordinar las principales fundaciones de asistencia a mujeres, ancianos y niños. Ejerció un rol activo en lo comunicacional a pesar de no ejercer cargos y se transformó en la principal voz impulsora del voto de las mujeres desde 1946, año en que asumió su marido, Juan Domingo Perón.
"Recién en 1947 se sanciona la ley y en 1951 las mujeres votan y pueden ser electas, dato importante para sacarlas del rol pasivo en la que las coloca el machismo. Fueron elegidas como representantes más de 50 legisladoras nacionales, intendentas, concejalas en todo el país, un avance muy importante para el empoderamiento de la mujer", opinó Pigna.
Existen cientos, miles de mujeres que podrían ser mencionadas, escritoras y militantes feministas como Alfonsina Storni o Victoria Ocampo, y luchadoras sociales y políticas como Adelina Di Carlo, Emma Day, Gabriela Laperriere, Carolina Muzzilli, Fenia Chertkoff, Carmela Horne, cuya lucha fue fundamental para alcanzar lo que se terminó de acuñar en 1947 y puesto en práctica en 1951.
Los golpes de Estado y dictaduras que diezmaron los derechos civiles en Argentina durante el siglo XX continuaron poniendo en jaque estos avances y conquistas, y la lucha por la igualdad de derechos entre hombres y mujeres así como de las mujeres sobre sus propios cuerpos continúa hasta la actualidad.