"La suba de 56,3 hace pensar que va a ser la primera variación interanual por sobre la inflación", señaló el director de la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip), Leandro Cuccioli, en rueda de prensa.
No se pueden comparar todavía los ingresos tributarios de agosto con la inflación de ese mes, dato todavía no disponible, pero la depreciación de la moneda local, que cayó 23,3% en las últimas tres semanas, y el consiguiente traslado a precios permite anticipar que de nuevo la recaudación quedaría por debajo.
Los ingresos tributarios en el octavo mes de este año subieron gracias al aumento de 519,4% que se ingresaron por derechos de exportación, en parte por la depreciación del peso argentino y por los derechos de exportación adicionales, si bien contrarrestó una caída en los precios de la soja.
El valor neto del impuesto de valor agregado (IVA), creció 44,1%, mientras que el impositivo creció 49,2% y el aduanero 40,9%.
El impuesto a las ganancias aumentó a su vez 49,5%, un resultado que "se vio atenuado por la disminución de la tasa del impuesto para las sociedades del 35% al 30% contemplada en la reforma tributaria", informó la Afip.
Crecieron también el impuesto a los débitos y créditos en cuenta corriente crecieron el 53,8%.
Por su parte, los derechos de importación también registraron un alza de 51,4%, mientras que los impuestos por la venta de combustibles crecieron 26,3%.
La moneda local se depreció 23,3% luego de las elecciones primarias del pasado 11 de agosto, cuando el candidato opositor Alberto Fernández sacó más de 16 puntos de ventaja al presidente Mauricio Macri, lo que ha desatado una inestabilidad cambiaria y monetaria en las últimas semanas.