"Después de tantos años de resistencia, ahora (estamos) recuperando formas y vivencias del pasado, en armonía con la Madre Tierra", dijo el presidente Evo Morales en la celebración principal, realizada en las ruinas de la cultura andina de Tiwanacu.
El gobernante anunció como un "reconocimiento" a los pueblos originarios de América la resolución aprobada el jueves por la Asamblea General de las Naciones Unidas, declarando al 21 de junio como Día Internacional del Solsticio.
La celebración del Año Indígena, transmitida por la televisión estatal, comenzó antes de la salida del Sol, cuando Morales y otras autoridades y líderes indígenas presentaron como ofrendas varios "sullus" o fetos de llama, en canastones que contenían también coloridos tejidos, quinua y otros granos andinos, además de alcohol y vino.
Un sacerdote aymara quemó las ofrendas en una fogata, en un espacio abierto en medio de las ruinas, en una planicie a 3.880 metros sobre el nivel del mar.
Aún ardían las ofrendas cuando, a las 7:17 hora local, los primeros rayos del sol cayeron sobre las ruinas tiwanacotas, para alborozo de los asistentes que los recibieron extendiendo las manos hacia la luz que emergía desde la cordillera circundante.
El sacerdote indígena hizo una plegaria de agradecimiento a la Pachamama y al Tata Inti, augurando un año nuevo muy fructífero, especialmente en la agricultura, actividad principal del altiplano boliviano.
Pidió bendiciones para Morales y para la quincena de embajadores extranjeros que se sumaron a la celebración en la fría madrugada altiplánica, cerca del lago Titicaca, a unos 70 kilómetros al oeste de La Paz.
La celebración del llamado oficialmente Año Nuevo Andino, Amazónico y del Chaco, que incluyó presentaciones de grupos de música y bailes folclóricos, se replicó en diversas ruinas prehispánicas y otros sitios históricos y tradicionales de todo el país.
Te puede interesar: Turismo de la mano de las comunidades indígenas
Morales, indígena que gobierna Bolivia desde 2006 y pretende ganar un cuarto mandato consecutivo en elecciones convocadas para octubre venidero, declaró feriado nacional al solsticio de invierno austral como parte de su política de recuperación de valores ancestrales.
Morales encabezó el 20 de junio una caminata por un sendero altiplánico que formaba parte del Qhapac Ñan, junto con embajadores y delegaciones de movimientos sociales y estudiantes de Argentina, Chile, Colombia, Ecuador y Perú, países en los que hay todavía trechos intactos del Camino del Inca.
El sistema vial incaico ha sido declarado Patrimonio Universal por Naciones Unidas.