La tradición cristiana marca que el cumpleaños de Cristo, la Navidad, se festeja el 25 de diciembre. Una semana y un día antes es la fecha de nacimiento de otra importante figura de la Iglesia católica: el papa Francisco. Jorge Mario Bergoglio, como se llama en el registro civil, nació el 17 de diciembre de 1936 en el barrio de Flores de la Ciudad de Buenos Aires.
Su asunción fue importante simbólicamente: la región nunca había encabezado la cátedra de San Pedro, a pesar de concentrar la mayor cantidad de católicos en el mundo.
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Por eso, no llama la atención que buena parte de los presidentes de la región lo hayan felicitado en su día. Por ejemplo, el mismo presidente de su patria de nacimiento, Mauricio Macri. A pesar de las polémicas por las evasivas del papa de visitar su tierra, el mandatario le deseó el mejor de los días.
Más efusivo y con más connotaciones de creencia fue el mensaje del mandatario venezolano Nicolás Maduro, que en repetidas ocasiones ha manifestado su devoción religiosa. Además, incluyó una foto del cumpleañero en su tuit.
Evo Morales, presidente de Bolivia, destacó con un vídeo la vocación de Francisco como "papa de los pobres". El jefe de Estado boliviano causó polémica en julio de 2015, cuando obsequió a Bergoglio una artesanía de un crucifijo estilizado, en la que los palos de la cruz se veían como una hoz y un martillo.
Nacido del matrimonio entre un italiano escapado del fascismo y una argentina hija de italianos, Bergoglio fue subiendo en la jerarquía católica hasta consagrarse en 2013 como el sumo pontífice.