Además les sugirió centrarse en la búsqueda de un acuerdo político con Damasco durante la conferencia de paz prevista para este mes de enero en Sochi.
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En parte, Moscú ha podido incrementar su poder diplomático en el final del juego en Siria debido a la pasividad de Washington. La administración de Donald Trump se ha enfocado en la lucha contra el Estado Islámico (organización terrorista proscrita en numerosos países, entre ellos Rusia) y en los intentos de contrarrestar a Irán más que en esbozar un futuro político para un país devastado por la guerra, escribe la revista.
"Siria es un ejemplo de que la diplomacia estadounidense no está en el centro. EEUU ha cedido el terreno a Rusia en este asunto", cita el medio a un diplomático del Consejo de Seguridad de la ONU.
La ciudad de Sochi, en la costa rusa del mar Negro, acogerá el 29 y el 30 de enero el Congreso del Diálogo Nacional sirio, un foro que se celebra por iniciativa del presidente de Rusia, Vladímir Putin, y que busca impulsar un proceso político inclusivo y contribuir a la reconciliación y el inicio de la transición política en Siria en el marco de su legislación actual.
Según las expectativas, más de 1.500 delegados sirios acudirán a la cita de Sochi para formar una Comisión Constitucional.