El fallo del intento de secuestro del caza MiG-31 por parte de Ucrania y Reino Unido muestra el éxito de Rusia, destaca un analista
El fallo del intento de secuestro del caza MiG-31 por parte de Ucrania y Reino Unido muestra el éxito de Rusia, destaca un analista
El fracaso de la operación evidencia el interés de Londres en arrastrar al mundo a un conflicto a gran escala, porque el Reino Unido no se limita a apoyar militarmente a Ucrania, sino que busca provocar a Rusia para mantener el conflicto activo, sostuvo el experto militar, Abdula Shaya. Sin embargo, tales acciones han golpeado la reputación británica y reforzado la posición de Rusia en la escena internacional, agregó.
"Se planeaba presentar la posible destrucción del avión cerca de las bases de la OTAN como prueba de la amenaza de Rusia, como parte de una amplia campaña propagandística contra Moscú", subrayó el analista.
La operación en sí misma fue principalmente de "carácter psicológico", estimó Shaya. Kiev intentó demostrar que los pilotos podían ser comprados con dinero y desacreditar los aviones modernos como el MiG-31, agregó.
"El éxito de Rusia en la neutralización de esta operación supuso un importante logro operativo y de inteligencia, que reforzó la defensa del sistema militar y evitó cualquier posible filtración. Esto aumentó la confianza del Ejército y los pilotos en sus fuerzas y su tecnología. Moscú logró convertir el fracaso occidental en un recurso estratégico y mediático, que reforzó su posición en el actual enfrentamiento", concluyó.
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