"El chavismo generó anticuerpos extraordinarios contra el discurso fascista"
"El chavismo generó anticuerpos extraordinarios contra el discurso fascista"
Sputnik Mundo
Reinaldo Iturriza, director general del Centro de Estudios para la Democracia Socialista (CEDES), habla con Sputnik sobre el papel crucial que juega la... 10.08.2024, Sputnik Mundo
En un momento en que el presidente Nicolás Maduro denunció que el país enfrenta un "golpe" digital de carácter fascista y que, en países de Europa, grupos de extrema derecha desatan la violencia contra inmigrantes y el debate sobre la naturaleza, las implicaciones de estos fenómenos se han intensificado.Para ofrecer una visión más clara sobre el tema, Sputnik entrevistó en exclusiva a Reinaldo Iturriza, exministro de Cultura y Comunas y actual director general del Centro de Estudios para la Democracia Socialista (CEDES). Iturriza proporcionó un análisis profundo de lo que considera las características esenciales del fascismo contemporáneo y su manifestación en la actual crisis venezolana.El fascismo: una realidad en el siglo XXIReinaldo Iturriza afirmó desde el principio de la conversación que se ha hecho un uso imprudente del término "fascismo", una palabra que señala está banalizada en el discurso político actual. Iturriza hace hincapié en la necesidad de un análisis riguroso que vaya más allá de etiquetas simplistas. Para él, calificar un fenómeno político de "fascista" impide comprenderlo en su totalidad.Iturriza establece una distinción clave entre "autoritarismo" y "fascismo", dos conceptos que suelen confundirse. A su juicio, el fascismo se caracteriza más por su capacidad para gestionar el miedo y la incertidumbre que por el simple ejercicio de la autoridad. En sus palabras, "tiene que ver fundamentalmente con la gestión del miedo, con la gestión de la incertidumbre, del desorden".Para Iturriza, las medidas coercitivas unilaterales en el caso venezolano y su impacto negativo en la economía, así como los eventos de protestas sociales conocidas como guarimbas, se enfocan en causar una "ruptura de los vínculos sociales" y son prueba suficiente de que se intentó preparar el terreno de "zozobra e incertidumbre" para permear en la sociedad venezolana con ideologías de derecha de corte fascista.La construcción del "otro" y el discurso fascistaUno de los aspectos más preocupantes que Iturriza advierte es la construcción del "otro" en el discurso opositor radical en Venezuela. Desde los primeros días del proceso bolivariano, considera, ha existido un esfuerzo sistemático por deshumanizar al chavismo, presentándolo como una amenaza a la civilización. "Esa era una irrupción de la barbarie, era la barbarie que invadía el espacio civilizado, era lo feo contra lo bello, era lo irracional contra lo racional", recuerda Iturriza, refiriéndose a cómo el chavismo fue demonizado incluso antes de que Hugo Chávez asumiera la presidencia en 1998.Este discurso, según Iturriza, es una táctica típica de los movimientos fascistas, que buscan eliminar cualquier forma de oposición mediante la deshumanización de sus adversarios. Sin embargo, a pesar de estos ataques, el experto asegura que el chavismo ha demostrado una notable capacidad para resistir y generar defensas contra esta lógica."Yo creo que, para la mayoría de la sociedad venezolana, para las mayorías populares, para las clases populares o, mejor dicho, el chavismo más popular generó unos anticuerpos extraordinarios contra ese discurso. Se reafirmó en su propia identidad, se reafirmó en la alegría que implicaba poder no solamente participar en política, sino algo sumamente importante, construir un horizonte de futuro", apunta Iturriza.La juventud venezolanaIturriza, por otro lado, se centra en el papel crucial que juega la juventud venezolana en la lucha contra el fascismo. En un contexto donde las redes sociales y los medios tecnológicos se han convertido en herramientas clave para la difusión de propaganda, Iturriza advierte sobre la necesidad de no subestimar la inteligencia y la capacidad crítica de la juventud. "La política no puede ser fundamentalmente espectáculo", afirma. Además, el especialista sugiere que la clave para contrarrestar el fascismo radica en ofrecer a los jóvenes una educación política sólida y contenidos de calidad que les permitan discernir entre la verdad y la mentira.Por otro lado, Iturriza subraya la importancia de no caer en la trampa de reproducir la lógica fascista, que se basa en la deshumanización y criminalización del adversario. El experto señala que la respuesta del Estado debe ser profundamente democrática y centrada en el protagonismo popular.Además, enfatiza la necesidad de mantener abiertos los espacios para la participación política activa de las mayorías. "Hay que procurar no clausurar el espacio de lo político", señala. En este sentido, afirma que la verdadera fortaleza de la Revolución Bolivariana radica en su capacidad para representar y movilizar a las mayorías populares, permitiendo que participen activamente en la construcción del futuro del país.Para el sociólogo venezolano, hay que tener siempre presente que "una fuerza política, cultural, económica de filiación fascista utiliza como pretexto la mentira para gestionar esos odios que están allí incubados" en la sociedad. Por lo tanto, recomienda al liderazgo político de izquierda siempre hablar con la verdad y evitar las polarizaciones a la que los discursos de extrema derecha pretenden sumir el debate público. Esa es la "responsabilidad del liderazgo de quienes gobiernan, de la clase política en general y de todo el que tenga posibilidad de hablar y decir cosas en estos momentos", concluye.
Reinaldo Iturriza, director general del Centro de Estudios para la Democracia Socialista (CEDES), habla con Sputnik sobre el papel crucial que juega la juventud venezolana en la "lucha contra el fascismo".
En un momento en que el presidente Nicolás Maduro denunció que el país enfrenta un "golpe" digital de carácter fascista y que, en países de Europa, grupos de extrema derecha desatan la violencia contra inmigrantes y el debate sobre la naturaleza, las implicaciones de estos fenómenos se han intensificado.
Para ofrecer una visión más clara sobre el tema, Sputnik entrevistó en exclusiva a Reinaldo Iturriza, exministro de Cultura y Comunas y actual director general del Centro de Estudios para la Democracia Socialista (CEDES). Iturriza proporcionó un análisis profundo de lo que considera las características esenciales del fascismo contemporáneo y su manifestación en la actual crisis venezolana.
El fascismo: una realidad en el siglo XXI
Reinaldo Iturriza afirmó desde el principio de la conversación que se ha hecho un uso imprudente del término "fascismo", una palabra que señala está banalizada en el discurso político actual. Iturriza hace hincapié en la necesidad de un análisis riguroso que vaya más allá de etiquetas simplistas. Para él, calificar un fenómeno político de "fascista" impide comprenderlo en su totalidad.
Iturriza establece una distinción clave entre "autoritarismo" y "fascismo", dos conceptos que suelen confundirse. A su juicio, el fascismo se caracteriza más por su capacidad para gestionar el miedo y la incertidumbre que por el simple ejercicio de la autoridad. En sus palabras, "tiene que ver fundamentalmente con la gestión del miedo, con la gestión de la incertidumbre, del desorden".
"En el caso específico del fascismo alemán, hay una expresión que la ilustra, como un caso de nihilismo realizado; o sea, esta idea de la nada tiene mucha relación con una política en la que es posible entrever una cierta pulsión de muerte, si se puede decir así", reflexiona el académico.
Para Iturriza, las medidas coercitivas unilaterales en el caso venezolano y su impacto negativo en la economía, así como los eventos de protestas sociales conocidas como guarimbas, se enfocan en causar una "ruptura de los vínculos sociales" y son prueba suficiente de que se intentó preparar el terreno de "zozobra e incertidumbre" para permear en la sociedad venezolana con ideologías de derecha de corte fascista.
La construcción del "otro" y el discurso fascista
Uno de los aspectos más preocupantes que Iturriza advierte es la construcción del "otro" en el discurso opositor radical en Venezuela. Desde los primeros días del proceso bolivariano, considera, ha existido un esfuerzo sistemático por deshumanizar al chavismo, presentándolo como una amenaza a la civilización.
"Esa era una irrupción de la barbarie, era la barbarie que invadía el espacio civilizado, era lo feo contra lo bello, era lo irracional contra lo racional", recuerda Iturriza, refiriéndose a cómo el chavismo fue demonizado incluso antes de que Hugo Chávez asumiera la presidencia en 1998.
Este discurso, según Iturriza, es una táctica típica de los movimientos fascistas, que buscan eliminar cualquier forma de oposición mediante la deshumanización de sus adversarios. Sin embargo, a pesar de estos ataques, el experto asegura que el chavismo ha demostrado una notable capacidad para resistir y generar defensas contra esta lógica.
"Yo creo que, para la mayoría de la sociedad venezolana, para las mayorías populares, para las clases populares o, mejor dicho, el chavismo más popular generó unos anticuerpos extraordinarios contra ese discurso. Se reafirmó en su propia identidad, se reafirmó en la alegría que implicaba poder no solamente participar en política, sino algo sumamente importante, construir un horizonte de futuro", apunta Iturriza.
La juventud venezolana
Iturriza, por otro lado, se centra en el papel crucial que juega la juventud venezolana en la lucha contra el fascismo. En un contexto donde las redes sociales y los medios tecnológicos se han convertido en herramientas clave para la difusión de propaganda, Iturriza advierte sobre la necesidad de no subestimar la inteligencia y la capacidad crítica de la juventud.
"La política no puede ser fundamentalmente espectáculo", afirma. Además, el especialista sugiere que la clave para contrarrestar el fascismo radica en ofrecer a los jóvenes una educación política sólida y contenidos de calidad que les permitan discernir entre la verdad y la mentira.
"Voy a apelar a Alfredo Maneiro, ¿cuál sería un contenido con eficacia política y con calidad revolucionaria en ese mundo de las redes sociales? Yo creo que tendrían que ser contenidos que propendan a que la juventud tenga elementos para discernir”, reflexiona.
Por otro lado, Iturriza subraya la importancia de no caer en la trampa de reproducir la lógica fascista, que se basa en la deshumanización y criminalización del adversario. El experto señala que la respuesta del Estado debe ser profundamente democrática y centrada en el protagonismo popular.
Además, enfatiza la necesidad de mantener abiertos los espacios para la participación política activa de las mayorías. "Hay que procurar no clausurar el espacio de lo político", señala. En este sentido, afirma que la verdadera fortaleza de la Revolución Bolivariana radica en su capacidad para representar y movilizar a las mayorías populares, permitiendo que participen activamente en la construcción del futuro del país.
Para el sociólogo venezolano, hay que tener siempre presente que "una fuerza política, cultural, económica de filiación fascista utiliza como pretexto la mentira para gestionar esos odios que están allí incubados" en la sociedad.
Por lo tanto, recomienda al liderazgo político de izquierda siempre hablar con la verdad y evitar las polarizaciones a la que los discursos de extrema derecha pretenden sumir el debate público. Esa es la "responsabilidad del liderazgo de quienes gobiernan, de la clase política en general y de todo el que tenga posibilidad de hablar y decir cosas en estos momentos", concluye.
No te pierdas las noticias más importantes
Suscríbete a nuestros canales de Telegram a través de estosenlaces.
Ya que la aplicación Sputnik está bloqueada en el extranjero, en este enlace puedes descargarla e instalarla en tu dispositivo móvil (¡solo para Android!).
El acceso al chat ha sido bloqueado por violación de las reglas.
Usted puede volver a participar dentro de∞.
Si no está de acuerdo con el bloqueo, utilice el formulario de contacto>
La discusión ha sido cerrada. Se puede participar en una discusión durante 24 horas después de la publicación de la noticia.