Un legislador ruso a EEUU sobre el envío de municiones de racimo a Kiev: "La respuesta será dura"
Un legislador ruso a EEUU sobre el envío de municiones de racimo a Kiev: "La respuesta será dura"
Sputnik Mundo
La respuesta de Rusia a la decisión de Estados Unidos de suministrar municiones de racimo a Ucrania será muy seria, dijo a Sputnik Grigori Karasin, jefe de la... 07.07.2023, Sputnik Mundo
Luego de que el Pentágono anunciara un nuevo paquete de ayuda militar para Kiev que incluye el suministro de municiones de racimo, desde Moscú se volvieron a emitir las alertas por esa acción que llevaría a una escalada más del conflicto ucraniano. Las municiones de racimo son un armamento considerado de alta peligrosidad para la ONU y están prohibidas en más de un centenar de países. Por su parte, el senador ruso Serguéi Tsekov alertó a Sputnik que el uso de municiones de racimo podría provocar la muerte masiva de civiles. "Esperemos que nuestras Fuerzas Armadas eliminen las municiones antes de su uso", aseveró.La Convención sobre Municiones de Racimo, adoptada en 2008, es el único tratado internacional vinculante que prohíbe el uso de estas armas. Hasta ahora más de 100 países se han adherido al acuerdo, pero todavía no forman parte Estados Unidos, Rusia, China, la India, Irán, Pakistán, Turquía, Corea del Norte, Corea del Sur y Ucrania.El representante permanente de Rusia ante la ONU, Vasili Nebenzia, advirtió que la transferencia de esta clase de municiones a Kiev por parte de Washington sería un paso más hacia la escalada del conflicto. Austria también se pronunció en contra del suministro de municiones de racimo a Ucrania porque ese tipo de munición representa un peligro a largo plazo para la población civil, declaró el ministro de Asuntos Exteriores de ese país, Alexander Schallenberg.El uso de municiones de racimo en Ucrania fue condenado incluso por Washington en febrero de 2022. La exportavoz de la Casa Blanca Jen Psaki aseguró que su uso era "un crimen de guerra". Sin embargo, conforme avanzó el conflicto en Ucrania, el país norteamericano fue cambiando su postura hasta el punto de ahora considerar a esta munición como algo necesario para las tropas de Volodímir Zelenski. Las municiones de racimo, también llamadas cluster, de dispersión o fragmentación, son lanzadas en caída libre y contienen un dispositivo que al abrirse libera miles de pequeñas submuniciones que se dispersan en un radio de hasta 400 metros.
La respuesta de Rusia a la decisión de Estados Unidos de suministrar municiones de racimo a Ucrania será muy seria, dijo a Sputnik Grigori Karasin, jefe de la Comisión de Asuntos Exteriores de la Cámara alta del país euroasiático.
Luego de que el Pentágono anunciara un nuevo paquete de ayuda militar para Kiev que incluye el suministro de municiones de racimo, desde Moscú se volvieron a emitir las alertas por esa acción que llevaría a una escalada más del conflicto ucraniano.
"Un nuevo paso hacia la escalada de la situación en torno a Ucrania, a la que la respuesta [de Rusia] será muy dura. Espero que la comunidad internacional tome conciencia de la situación que es cada vez más alarmante y suscita serias preocupaciones sobre hacia dónde se está degradando el conflicto", declaró el senador Karasin.
Las municiones de racimo son un armamento considerado de alta peligrosidad para la ONU y están prohibidas en más de un centenar de países.
Por su parte, el senador ruso Serguéi Tsekov alertó a Sputnik que el uso de municiones de racimo podría provocar la muerte masiva de civiles.
"Esperemos que nuestras Fuerzas Armadas eliminen las municiones antes de su uso", aseveró.
La Convención sobre Municiones de Racimo, adoptada en 2008, es el único tratado internacional vinculante que prohíbe el uso de estas armas. Hasta ahora más de 100 países se han adherido al acuerdo, pero todavía no forman parte Estados Unidos, Rusia, China, la India, Irán, Pakistán, Turquía, Corea del Norte, Corea del Sur y Ucrania.
El representante permanente de Rusia ante la ONU, Vasili Nebenzia, advirtió que la transferencia de esta clase de municiones a Kiev por parte de Washington sería un paso más hacia la escalada del conflicto. Austria también se pronunció en contra del suministro de municiones de racimo a Ucrania porque ese tipo de munición representa un peligro a largo plazo para la población civil, declaró el ministro de Asuntos Exteriores de ese país, Alexander Schallenberg.
El uso de municiones de racimo en Ucrania fue condenado incluso por Washington en febrero de 2022. La exportavoz de la Casa Blanca Jen Psaki aseguró que su uso era "un crimen de guerra". Sin embargo, conforme avanzó el conflicto en Ucrania, el país norteamericano fue cambiando su postura hasta el punto de ahora considerar a esta munición como algo necesario para las tropas de Volodímir Zelenski.
Las municiones de racimo, también llamadas cluster, de dispersión o fragmentación, son lanzadas en caída libre y contienen un dispositivo que al abrirse libera miles de pequeñas submuniciones que se dispersan en un radio de hasta 400 metros.
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