Una abogada afirma que los fiscales del caso MH17 intentaron influir en opinión pública y proceso
Una abogada afirma que los fiscales del caso MH17 intentaron influir en opinión pública y proceso
Sputnik Mundo
SCHIPHOL, PAÍSES BAJOS (Sputnik) — La fiscalía de Países Bajos que investigó el caso del derribo del vuelo MH17 intentó ejercer influencia sobre la opinión... 09.03.2022, Sputnik Mundo
El 7 de marzo se reanudaron las audiencias en el marco del proceso que se desarrolla en el tribunal de máxima seguridad de Schiphol, sobre el derribo del vuelo MH17 sucedido en el este de Ucrania en 2014. En estas audiencias trabajan los abogados Sabine ten Doesschate y Boudewijn van Eijck, que defienden al ciudadano de Rusia Oleg Pulátov.Según Ten Doesschate, la fiscalía convocaba ruedas de prensa en las que "en vez de informar, creaba una percepción tendenciosa de ese asunto en los medios de comunicación", presentaba los hechos desde un firme convencimiento de que el avión fue derribado por el sistema ruso Buk de la brigada 53 de las FFAA de Rusia, acuartelada en la ciudad rusa de Kursk, sin admitir ninguna versión alternativa de los hechos.El 17 de julio de 2014, el vuelo MH17 de la compañía Malaysia Airlines que se dirigía de Ámsterdam a Kuala Lumpur, fue alcanzado por un misil cuando sobrevolaba la provincia de Donetsk, en el este de Ucrania, zona convulsionada por los enfrentamientos entre las tropas ucranianas y las milicias.El proceso judicial sobre el siniestro del MH17 comenzó en Países Bajos el 9 de marzo de 2020. Como presuntos responsables figuran los rusos Ígor Guirkin, Serguéi Dubinski y Oleg Pulátov y el ucraniano Leonid Járchenko. En diciembre de 2021 la fiscalía neerlandesa pronunció la sentencia acusatoria y exigió la pena vitalicia para los cuatro, a quienes presentó como un grupo organizado culpable de la catástrofe del avión y la muerte de las 298 personas que estaban a bordo.Una investigación llevada a cabo por Rusia estableció partiendo de datos de radares que el misil con el que fue derribado el vuelo MH17 pertenecía al Ejército ucraniano. Ucrania se negó a presentar los datos de sus radares, Estados Unidos a su vez no quiso ofrecer fotos satelitales, que —según afirmó— reflejaban el momento del lanzamiento del cohete.El fiscal general adjunto ruso Nikolái Vinnichenko dijo en su tiempo a Sputnik que Moscú colaboró con las autoridades holandesas, proporcionándoles imágenes de radares y documentos que evidencian claramente que el misil que derribó el avión pertenecía a Ucrania y que el proyectil fue lanzado desde una zona controlada por el Ejército ucraniano, pero los investigadores neerlandeses decidieron no adjuntar esos datos al proceso.Países Bajos confirmó haber recibido los datos, pero la investigación se llevó a cabo sin la participación de la parte rusa, basándose en las declaraciones de testigos anónimos. Los abogados del ruso Pulátov declararon en más de una ocasión que eso impedía evaluar lo certero de tales testimonios, pero los fiscales neerlandeses insistían en que eso se hacía por razones de seguridad.El Ministerio de Asuntos Exteriores ruso calificó de infundadas las acusaciones sobre la implicación de Rusia en el derribo del Boeing malasio, declaró que la investigación se realizaba de un modo preconcebido y estaba lleno de dobles raseros.
SCHIPHOL, PAÍSES BAJOS (Sputnik) — La fiscalía de Países Bajos que investigó el caso del derribo del vuelo MH17 intentó ejercer influencia sobre la opinión pública con la ayuda de los medios de comunicación y de este modo influir también en el proceso, declaró la abogada Sabine ten Doesschate.
El 7 de marzo se reanudaron las audiencias en el marco del proceso que se desarrolla en el tribunal de máxima seguridad de Schiphol, sobre el derribo del vuelo MH17 sucedido en el este de Ucrania en 2014. En estas audiencias trabajan los abogados Sabine ten Doesschate y Boudewijn van Eijck, que defienden al ciudadano de Rusia Oleg Pulátov.
Según Ten Doesschate, la fiscalía convocaba ruedas de prensa en las que "en vez de informar, creaba una percepción tendenciosa de ese asunto en los medios de comunicación", presentaba los hechos desde un firme convencimiento de que el avión fue derribado por el sistema ruso Buk de la brigada 53 de las FFAA de Rusia, acuartelada en la ciudad rusa de Kursk, sin admitir ninguna versión alternativa de los hechos.
"Se puede informar a la opinión pública de los casos penales, pero se tiene que hacer de forma reservada, sin convocar ruedas de prensa internacionales", subrayó la letrada.
El 17 de julio de 2014, el vuelo MH17 de la compañía Malaysia Airlines que se dirigía de Ámsterdam a Kuala Lumpur, fue alcanzado por un misil cuando sobrevolaba la provincia de Donetsk, en el este de Ucrania, zona convulsionada por los enfrentamientos entre las tropas ucranianas y las milicias.
El proceso judicial sobre el siniestro del MH17 comenzó en Países Bajos el 9 de marzo de 2020. Como presuntos responsables figuran los rusos Ígor Guirkin, Serguéi Dubinski y Oleg Pulátov y el ucraniano Leonid Járchenko. En diciembre de 2021 la fiscalía neerlandesa pronunció la sentencia acusatoria y exigió la pena vitalicia para los cuatro, a quienes presentó como un grupo organizado culpable de la catástrofe del avión y la muerte de las 298 personas que estaban a bordo.
Una investigación llevada a cabo por Rusia estableció partiendo de datos de radares que el misil con el que fue derribado el vuelo MH17 pertenecía al Ejército ucraniano. Ucrania se negó a presentar los datos de sus radares, Estados Unidos a su vez no quiso ofrecer fotos satelitales, que —según afirmó— reflejaban el momento del lanzamiento del cohete.
El fiscal general adjunto ruso Nikolái Vinnichenko dijo en su tiempo a Sputnik que Moscú colaboró con las autoridades holandesas, proporcionándoles imágenes de radares y documentos que evidencian claramente que el misil que derribó el avión pertenecía a Ucrania y que el proyectil fue lanzado desde una zona controlada por el Ejército ucraniano, pero los investigadores neerlandeses decidieron no adjuntar esos datos al proceso.
Países Bajos confirmó haber recibido los datos, pero la investigación se llevó a cabo sin la participación de la parte rusa, basándose en las declaraciones de testigos anónimos. Los abogados del ruso Pulátov declararon en más de una ocasión que eso impedía evaluar lo certero de tales testimonios, pero los fiscales neerlandeses insistían en que eso se hacía por razones de seguridad.
El Ministerio de Asuntos Exteriores ruso calificó de infundadas las acusaciones sobre la implicación de Rusia en el derribo del Boeing malasio, declaró que la investigación se realizaba de un modo preconcebido y estaba lleno de dobles raseros.
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