La noche más mágica del año en España pierde hechizo
10:46 GMT 24.06.2021 (actualizado: 10:58 GMT 24.06.2021)
© AFP 2023 / José JordánEstructura quemándose la Noche de San Juan en Alicante
© AFP 2023 / José Jordán
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La Noche de San Juan repite edición atípica. En 2021, con la pandemia todavía presente, muchas ciudades decidieron cerrar sus playas para evitar aglomeraciones. En lugares como Barcelona, donde se optó por mantenerlas abiertas, centenares de personas se agolparon en los arenales. En algunos casos, sin mascarilla.
Es la noche más corta del año. También se cree que es la más mágica. La Noche de San Juan es momento de fuego, pólvora y ritual. Bajo la luz de la luna, la costumbre marca que se levanten hogueras a las que arrojar nuestros deseos. Mientras arden, muchos saltan las llamas en busca de la buena suerte. Una tradición que suele encontrar como escenario las playas de todo el país. Y es que se comenta que zambullirse en el mar la madrugada entre el 23 y el 24 de junio atrae la fortuna. Al menos, eso dice.
Un año estándar, el litoral español se iluminaría con la luz de las fogatas y resonaría a olas y voces de personas. Con la pandemia aún presente, el deseo de quemar deseos se queda en casa. Para evitar aglomeraciones, las autoridades locales y autonómicas de algunos territorios optaron por el cierre de las playas durante la noche más corta del año.
© Europa Press / Jorge Gil Desalojo de la playa de la Malvarrosa (Valencia)
Desalojo de la playa de la Malvarrosa (Valencia)
© Europa Press / Jorge Gil
En Galicia, los arenales cerraron a las 21:00. Las vallas impedían el acceso de la ciudadanía. Mismo caso que el de Valencia, donde los agentes desalojaron el litoral desde primera hora de la velada. Palma de Mallorca, Ibiza o Málaga también escogieron esta medida. "Los malagueños han respondido con civismo y responsabilidad", ha comentado el alcalde de la ciudad andaluza, Francisco de la Torre, a través de Twitter.
Otros emplazamientos decidieron celebrar la Noche de San Juan de una manera distinta. En Gijón, el solsticio de verano se festejó con una hoguera, pero no de leña, sino virtual. En Oviedo, las llamas se proyectaron en forma de vídeo en la plaza de la Catedral. Mientras, en Badajoz, los fuegos artificiales llenaron el cielo de colores.
Noche de San Juan en Las Canteras 2019 vs 2021 @LasCanteras @canarias7 pic.twitter.com/Kijrs8lP3M
— JAG (@JoseAG18461604) June 23, 2021
Aunque sea virtual, desde #Asturias, os deseamos una… ¡Feliz Noche de San Juan! pic.twitter.com/XEjrifDGol
— TurismoAsturias (@TurismoAsturias) June 23, 2021
Fuegos artificiales San Juan 2021, Badajoz. 🎡 pic.twitter.com/nJDVieGw1K
— Pablzz. 💔 (@paabloestevez) June 23, 2021
A pesar de haber transcurrido la noche con normalidad en la mayor parte de España, hubo excepciones. En Barcelona, donde las playas no se cerraron, la euforia popular pudo con la realidad. El control de acceso a lugares como La Barceloneta no fue suficiente para evitar imágenes que nos recuerdan a una etapa anterior a 2020. Aglomeraciones de personas sin mascarilla, sin guardar la distancia de seguridad y sin cumplir ninguna restricción frente al coronavirus.
No será una noche de San Juan como las de antes.Hay que llevar mascarilla,guardar las distancias,no crear aglomeraciones,....
— Rulo (@rulogomezgarcia) June 24, 2021
Anoche,en Barcelona: pic.twitter.com/J0j0h93dDw
Más allá de Cataluña, en Cádiz, la playa de la Caleta tuvo que ser desalojada por la Policía Local y la Policía Nacional. Aproximadamente un millar de jóvenes se reunieron en la arena para incurrir en botellones y música a todo volumen. En Cartagena, un agente de la Policía Local fue apedreado por intentar evitar una hoguera en un descampado, este año prohibidas por la pandemia.
Pero, no todo el mundo eligió conmemorar la Noche de San Juan en la calle. Hubo quien se encomendó a alguno de los rituales para demandar salud, amor, dinero o felicidad en su propia casa. Ya fuera quemando papeles con deseos, encendiendo una vela, cascando un huevo a la luz de la luna o durmiendo con tres patatas bajo la almohada. Cada uno, con su historia. La idea es convocar a la suerte en la supuestamente noche más mágica del calendario. En menor o mayor cantidad, tras estos dos años, todos necesitamos una poca.