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Eso es lo que le pasó a un médico que decidió comer comida ultraprocesada por un mes

CC0 / Unsplash / Pollo frito
Pollo frito - Sputnik Mundo, 1920, 05.06.2021
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Un médico británico decidió cambiar radicalmente su dieta y alimentarse mayormente de comida chatarra a lo largo de todo un mes para observar los efectos de la alimentación en su organismo.
Durante cuatro semanas, Chris van Tulleken, médico de enfermedades infecciosas del sistema hospitalario del University College de Londres, elevó de un 20% a un 80% la proporción de comida ultraprocesada en su dieta. Entre los alimentos consumidos se encontraban, entre otras cosas, pizzas y lasañas congeladas, cereales matinales, postres industrializados.
Como sugiere su nombre, las comidas ultraprocesadas son alimentos que se someten a un intenso procesamiento industrial y a los cuales se agregan numerosas sustancias químicas, como emulsionantes, aromatizantes y colorantes.
En el video-diario del experimento, el hombre de 42 años relata sentirse constantemente hambriento, hasta el punto de tener dificultades para dormir bien por la noche debido a los deseos de comer más. También dice que ha pasado ha despertarse con una sensación similar a la de la resaca debido al consumo excesivo de sal y azúcar. Además, comparte que ha empezado a padecer estreñimiento.

"No lo estoy disfrutando, pero no puedo parar", comparte Tulleken en el vídeo.

Antes y después de los 30 días de cambios alimentarios, Tulleken consultó con un médico y se hizo numerosos exámenes. Los resultados fueron más sorprendentes de lo que había previsto el médico. Subió 6,5 kilogramos, tres de ellos de pura grasa corporal, y su índice de masa corporal (IMC) aumentó dos puntos.
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La dieta, adoptada por un 20% de los británicos, según Tulleken, causó también alarmantes cambios en su cerebro. Una resonancia magnética demostró que su mala alimentación creó nuevas conexiones entre los centros de recompensa del cerebro con áreas que impulsan el comportamiento automático repetitivo.

"Es decir, comer comida ultraprocesada se convirtió en algo que mi cerebro sencillamente me dice hacer sin que yo quiera. Sorprendentemente, esto es algo que podrías ver en una persona con adicción", compartió Tulleken en el video.

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