Teherán "espera que el secretario general de la ONU (António Guterres) y el Consejo de Seguridad condenen firmemente este acto terrorista inhumano y tomarán medidas necesarias contra sus autores", escribió el diplomático.
"Es un nuevo intento de sembrar caos en nuestra región y socavar el desarrollo científico y técnico de Irán", señaló.
Irán hará todo lo posible para defender a sus ciudadanos, declaró Majid Takht Ravanchi.
"Advirtiendo contra cualquier aventura de Estados Unidos e Israel contra mi país, sobre todo en el periodo restante de ejercicio de la actual administración de Estados Unidos, la República Islámica de Irán se reserva el derecho a tomar todas las medidas necesarias para defender a su pueblo y garantizar sus intereses", señaló el diplomático en una carta dirigida al secretario general de la ONU, António Guterres, y al Consejo de Seguridad.
Takht Ravanchi resaltó que el científico asesinado desempeñó un rol importante en el desarrollo de los test para detectar COVID-19 y también coordinó la elaboración de la vacuna anticoronavirus.
El Ministerio de Defensa de Irán informó que el destacado científico nuclear Mohsen Fajrizade murió en el hospital a causa de heridas que sufrió en un ataque cometido por un grupo de hombres armados.
Por su parte, el asesor del líder supremo de Irán, Hossein Dehghan, aseguró que Teherán responderá a este crimen.
Fajrizade, llamado en círculos diplomáticos "el padre de la bomba iraní", fue señalado por el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, en 2018, como el director del proyecto armamentístico nuclear del país persa.
Israel es sospechoso de haber matado a varios científicos iraníes a lo largo de los años en un intento por evitar el desarrollo del programa nuclear de Teherán.