Honor reanudará rápidamente la producción una vez que recupere su acceso al mercado de circuitos electrónicos y software estadounidenses, asegura su fundador Ren Zhengfei, quien criticó las tácticas utilizadas por la Administración Trump para contener a su compañía.
En su memorando el fundador de Huawei parece abordar la incertidumbre sobre si la separación de Honor podría reanudar el suministro de los chips estadounidenses bajo el nuevo propietario o si primero es necesario que se den los pasos regulatorios en Washington.
"Tras enfrentar ola tras ola de ataques desde EEUU, finalmente nos dimos cuenta de que los funcionarios estadounidenses no estaban tratando de cuidarnos. Estaban tratando de matarnos. Una vez que nos divorciemos, no habrá más relaciones bajo la mesa con Honor. Manejaremos la separación de manera adulta, y nos adheriremos rigurosamente a las regulaciones y las normas internacionales".
"EEUU es una superpotencia tecnológica que tiene muchas empresas excelentes. Usted debería trabajar con ellas de forma firme y audaz", resaltó Ren en su memorándum.
Honor fue parte integral del negocio de teléfonos inteligentes de Huawei, un día incluso superó al de la surcoreana Samsung Electronics, pero ahora está luchando por asegurar el suministro de los componentes y el software cruciales para mantener su producción.
Se espera que el acceso a la tecnología estadounidense le de una nueva vida a esta marca que ha ganado popularidad entre los usuarios más jóvenes y conscientes de su presupuesto. Además, Honor ha conseguido avanzar en los mercados extranjeros como el de Europa y tiene todo para convertirse en un rival de gigantes como Xiaomi y Oppo, que compiten en el segmento de precios bajos.
La venta de Honor pone de relieve el impacto que han causado las restricciones de EEUU. Sin embargo, a pesar de todos los ataques Huawei, con sede en Shenzhen, ha conseguido salvaguardar su negocio principal relacionado con la producción de equipos de telecomunicaciones. El gigante chino almacenó componentes críticos para seguir con el despliegue de las redes 5G dentro de su país hasta al menos 2021.