"El embajador de Ucrania, Ígor Kizim, fue citado al Ministerio de Asuntos Exteriores de Bielorrusia, donde le entregaron una nota en la que se expresa una decidida protesta contra las incesantes acciones antibielorrusas que se desarrollan enfrente de la embajada de la República de Bielorrusia en Kiev y se exige garantizar su seguridad a tenor con las normas de la Convención de Viena sobre relaciones diplomáticas del 18 de abril de 1961", comunicó.
Se hizo constar que la actividad improcedente de los elementos radicales crea un amenaza directa para el funcionamiento de la misión diplomática bielorrusa en Kiev y para la seguridad del personal de la embajada y sus familiares, dice el comunicado.
También se señala que Minsk "espera una reacción de la parte ucraniana a las provocaciones cometidas en Lvov contra el consulado honorario bielorruso, confiando en que los organismos judiciales de Ucrania investiguen y evalúen debidamente los actos de vandalismo cometidos y castiguen a los culpables".
Poco después, el ministro de Exteriores de la república, Vladímir Makéi, señaló que Bielorrusia considera "una burla al sentido común" la adhesión de Ucrania a las sanciones de la UE contra funcionarios bielorrusos.
"La adhesión de Ucrania a las sanciones de la UE, en nuestra opinión, es otra decisión ucraniana que muestra la falta de independencia (...). Francamente, la consideramos como una burla al sentido común", expresó Makéi en una rueda de prensa.
Afirmó que Bielorrusia ya tiene preparadas las sanciones contra varios altos funcionarios ucranianos.
"Vamos a observar el desarrollo de la situación, pero no dejaremos sin respuesta ninguna acción de Ucrania dirigida contra el Estado bielorruso", advirtió.
Bielorrusia es escenario de protestas desde el 9 de agosto contra los resultados de las elecciones presidenciales que revalidaron un nuevo período, el sexto ya, del actual mandatario Alexandr Lukashenko.
Durante la disolución de los congregados se usaron gas lacrimógeno, granadas aturdidoras y balas de goma.
Las acciones en apoyo a la oposición bielorrusa se celebran cerca de las sedes de las misiones diplomáticas de Bielorrusia en diversos países, en particular, en Kiev se erigió una especie de conjunto conmemorativo en homenaje a los manifestantes abatidos en Minsk.