"Estamos dispuestos a seguir cooperando en el marco de este importante documento, siempre que las demás partes que quedan cumplan a rajatabla con los requisitos de este documento", puntualizó en declaraciones a la cadena Rossiya 24.
El ministro ruso lamentó que EEUU decidiera romper el Tratado de Cielos Abiertos, al que calificó de "una herramienta para mantener la estabilidad y seguridad internacional".
Otros participantes occidentales del Tratado, afirmó, "se dan cuenta de que perder ese acuerdo equivaldría a una pérdida de la seguridad, sobre todo en Europa".
Por su parte, el viceministro de Exteriores de Rusia Serguéi Riabkov no descartó la posibilidad de salir del tratado tras EEUU.
En opinión de Riabkov, Rusia podría abandonarlo si el resto de signatarios traspasan información recolectada en el marco de los vuelos de observación a EEUU, que ya no forma parte del acuerdo, o si van a impedir que Rusia realice vuelos sobre las instalaciones militares estadounidenses ubicadas en el territorio de los signatarios del tratado.
"Así que sus propias declaraciones de que están preocupados por el destino del tratado, deben ir acompañadas de acciones concretas en este ámbito. Todo está en sus manos, no en las nuestras", subrayó.
A su vez, Francia también lamenta la decisión de EEUU de abandonar el Tratado de Cielos Abiertos, afirmó el Ministerio de Exteriores galo.
"Lamentamos la decisión de EEUU de salir del Tratado de Cielos Abiertos, cuyo funcionamiento nos aporta una transparencia y una previsibilidad aumentada en el ámbito de las actividades militares, en particular con Rusia", dice un fragmento de una rueda de prensa publicado por el Ministerio.
El Tratado de Cielos Abiertos, suscrito en 1992 en Helsinki, permite a los observadores militares realizar vuelos de vigilancia aérea para obtener imágenes de movimientos de tropas y buques en un vasto territorio desde la ciudad canadiense de Vancouver hasta el puerto de Vladivostok, en el Lejano Oriente ruso.
Ese documento, en vigor desde 2002, contaba hasta hace poco con 34 signatarios.
El pasado 21 de mayo el presidente estadounidense, Donald Trump, anunció la salida de su país de este tratado con el argumento de supuestos incumplimientos por parte de Rusia, pretexto que suele usar Washington para justificar su retirada de los acuerdos internacionales.
Varios países condenaron la decisión de la Casa Blanca.