Cuando la pandemia de COVID-19 alcanzó a América Latina, pocos se imaginaron que los coletazos del virus se seguirían sintiendo incluso un año después de los primeros brotes. Es que, independientemente de la carrera por las vacunas, varias de las actividades que estaban previstas para los primeros meses de 2021 comienzan paulatinamente a tener que cancelarse.
En América Latina, además del mundialmente famoso carnaval de Río, los carnavales del Caribe constituyen una de las mayores atracciones para turistas y público local. El Carnaval de Barranquilla es un ejemplo claro de las fiestas típicas del Caribe colombiano, que cada año reúnen desfiles, concursos y fiestas en las calles y ante multitudes. Sin embargo, en octubre se anunció su suspensión como consecuencia de la pandemia.
No se trató de decisiones a la ligera: en Barranquilla, por ejemplo, el carnaval no es solo una fiesta tradicional sino que también moviliza, según estimaciones de los organizadores, unos 405.000 millones de pesos colombianos (unos 111 millones de dólares) e involucra a unas 50.000 personas, con un alcance de más de 2 millones de espectadores.
La magnitud del impacto económico que podría provocar motivó a los organizadores a buscar, rápidamente, algunas alternativas para que la fiesta no se pierda por completo. Así surgió la idea de convocar a un "carnaval virtual".
Si bien la organización del carnaval no confirmó aún exactamente cómo se realizará la fiesta, el novedoso formato virtual deberá poder adaptar a formato digital los eventos principales del carnaval barranquillero: la Batalla de las Flores, el desfile que tradicionalmente abre oficialmente el carnaval, el gran baile al aire libre conocido como Baila la calle; y los desfiles denominados Gran Parada de Tradición y Folclor y la Gran Parada de Comparsas.
Barranquilla no es la única ciudad en este proceso. Santo Tomás, también en el departamento de Atlántico, aloja año a año al segundo carnaval en importancia en el Caribe colombiano y, dado que suele recibir a unas 600.000 personas cada año, decidió convertirlo en una celebración virtual durante 2021.
Carnaval 2021 en otros países
La intención de los carnavaleros colombianos de mantener la fiesta aunque sea virtual contrasta con las alternativas que han tomado los de otras zonas de América Latina. En República Dominicana, por ejemplo, se optó directamente por la cancelación del carnaval de La Vega, la fiesta carnavalesca más importante del país. Los organizadores anunciaron su intención de poder regresar en 2022.
Uruguay es otro de los países sudamericanos con gran tradición en el carnaval. Si bien el país ha registrado menos casos que el resto del continente, la multiplicación de contagios a partir de octubre llevó a que se decidiera la suspensión del Desfile de Llamadas. El Desfile Inaugural del Carnaval, la otra cita importante de la celebración, podría realizarse sin público.
Mientras tanto, el carnaval de Río de Janeiro continúa bajo suspensión como consecuencia de la pandemia de COVID-19.