En un comunicado, la Anvisa informó que los estudios clínicos de la vacuna Ad26COV2.S "ya pueden ser retomados" y que "garantiza la seguridad de los voluntarios brasileños que quieran participar en el experimento".
Los test se habían suspendido el pasado 12 de octubre, después de que un voluntario de EEUU presentara un efecto adverso grave.
Después de evaluar los datos del evento y las informaciones del Comité Independiente de Seguridad y de la autoridad regulatoria estadounidense, la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA), la Anvisa concluyó que "la relación entre beneficio y riesgo se mantiene favorable" y que el estudio puede continuar.
En el momento de la interrupción, en Brasil participaban 12 voluntarios, todos en el estado de Río de Janeiro (sureste), aunque al final del proceso el estudio pretende testar la vacuna en 7.560 personas de 11 estados.