El jefe de Estado de la Ciudad del Vaticano ha seleccionado a religiosos de todo el mundo para renovar el colegio cardenalicio. Tras el rezo del Ángelus desde la ventana del palacio pontificio, el papa anunció el nuevo consistorio, la ceremonia formal en que los cardenales asumen sus cargos.
Dos de los elegidos son latinos: se trata del arzobispo de origen español de Santiago de Chile, Celestino Aós Braco, y del arzobispo retirado de San Cristóbal de las Casas (México), monseñor Felipe Arizmendi Esquivel.
Uno de los nombres que más están resonando es el de Wilton Gregory. Este religioso es el arzobispo de Washington se va a convertir en el primer purpurado afroestadounidense de la historia de la Iglesia.
El pontífice también hará cardenales a candidatos de otros continentes, como es el caso del arzobispo de Kigali (Ruanda), Antoine Kambanda; del arzobispo de Capiz (Filipinas), José Fuerte Advincula o del vicario apostólico de Brunei, Cornelius Sim, entre otros.
Por ahora el Vaticano no ha dado detalles del consistorio, debido quizá a las restricciones de viaje a las que hay que atenerse a causa de la pandemia del coronavirus. Lo que sí se puede adelantar es que nueve de los 13 elegidos son menores de 80 años y, por tanto, serán electores, mientras que los otros cuatro no podrán ser participantes en un futuro cónclave, tal y como ha informado el Vaticano.