"Una vez consultados los representantes de los partidos y grupos con representación parlamentaria en el término de 10 días hábiles desde el cese del presidente de la Generalitat, esta presidencia constata que no le ha sido posible proponer al Pleno de la Cámara un candidato o candidata para ser investido presidente o presidenta de la Generalitat", anunció el presidente de la Cámara catalana al inicio de la sesión plenaria de este 21 de diciembre.

A partir de ahora da comienzo un periodo de dos meses en el cual los partidos podrán proponer a un candidato y, de no ser así, la Cámara quedará disuelta automáticamente el 21 de diciembre y Cataluña se encaminará a unas elecciones el 14 de febrero de 2021.
Según la información anunciada por los partidos con representación parlamentaria, es improbable que haya un sucesor con posibilidades de ser investido antes de diciembre.
Ni los independentistas pretenden presentar a un candidato, tal como pidió el mismo expresidente Torra, ni los partidos de la oposición suman los apoyos necesarios en la Cámara de mayoría soberanista para conseguir el aval a un sucesor propio.
Este periodo de transitoriedad deja al Ejecutivo regional con competencias reducidas para hacer frente a la pandemia del coronavirus, ya que entre otras cosas no podrá aprobar los presupuestos para 2021 ni impulsar nuevos proyectos de ley.