Corría el año 1868. España vivía tiempos turbulentos. La revolución llamada como la Gloriosa había tumbado la monarquía borbónica, al menos temporalmente. La reina Isabel II huía a París, ciudad de la que nunca regresaría. Se daba por comenzado un periodo denominado como el Sexenio Democrático. Etapa de la historia española en la que nacería la peseta.
Durante la ocupación napoleónica, habían circulado pesetas en Cataluña. En 1808, en Barcelona, se acuñó la primera, aunque sin contar con el respaldo de la oficialidad. Todo lo contrario que en 1869, cuando la madrileña fábrica de La Ceca, actualmente la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre-Real Casa de la Moneda (FNMT-RCM), acuña la primera peseta. Se trata de la unidad, que cuenta con la leyenda de "Gobierno Provisional" y la representación femenina de España tumbada sobre los Pirineos en el anverso de la moneda. En el reverso, se labraría el escudo de España. Esto en los valores de plata. En las monedas de bronce se grabaría una matrona sentada sobre las rocas, ilustración de España, en el anverso y un león sosteniendo el escudo nacional en el reverso. Este último sería confundido por el pueblo con un perro, motivo que dio pie a la aparición de los términos "perra chica" y "perra gorda".
La peseta se convertiría en un registro de la historia de España. Desde las primeras hasta las últimas. Reverso y anverso reflejarían escenas de la vida política, cultural, económica o religiosa del país. La vuelta de los Borbones devolvería a los reyes a monedas y billetes. Los motivos republicanos harían acto de presencia entre 1931 y 1939 hasta la llegada del dictador Francisco Franco, cuyo rostro sería grabado en el dinero español. Cristóbal Colón, Francisco de Goya, Gustavo Adolfo Béquer, Isabel la Católica, Calderón de la Barca o Rosalía de Castro serían algunas de las personalidades que aparecieron en las pesetas. Un registro histórico cortado por la llegada del euro, moneda oficial de España desde el uno de enero de 2002.
Pesetas de los años 1938 y 1940. pic.twitter.com/yvuWaj3sqv
— Antonio José Pérez Sánchez (@AntonioJoseRH) October 14, 2020
Últimos días para el cambio
La peseta dejó de circular el 28 de febrero de 2002. Desde esa fecha, los ciudadanos pudieron canjearlas por euros en cualquier banco o caja de ahorros hasta el 30 de junio de ese mismo año. A partir de ese momento, solo las sucursales del Banco de España tendrían la capacidad de realizar el cambio. El 31 de diciembre de 2020 será el último día que lo hagan.
No obstante, el Banco de España prevé que no todas las pesetas serán devueltas. Más allá de las perdidas, las deterioradas o las que han salido del país, bastantes ciudadanos decidirán guardarse un par. Algunos para aprovechar su venta a coleccionistas, si es que se trata de tiradas puntuales. Otros simplemente por nostalgia. Por conservar un trozo de la historia de España. Una parte que el 19 de octubre cumple 152 años.
¿Sabrías decir cuál de estas #pesetas no se puede cambiar por euros? Si crees que lo sabes, contesta en la encuesta del primer comentario. El próximo jueves, publicaremos la respuesta correcta #CambiaTusPesetas hasta el 31 de diciembre #PideCitaPrevia 👉 https://t.co/8bj16wNbL9 pic.twitter.com/Jn1fXhSGHo
— Banco de España (@BancoDeEspana) October 9, 2020