"Acabo de conversar con los ministros de Relaciones Exteriores de Armenia y Azerbaiyán para convencerlos de que el alto el fuego (en Nagorno Karabaj) debe observarse por ambas partes de forma incondicional", declaró Borrell.
Desde las 00:00 de este domingo (GMT+4) entró en vigor una nueva tregua humanitaria en Nagorno Karabaj, la segunda en lo que va de esta espiral de hostilidades en la zona. Al igual que en la primera ocasión, el 10 de octubre, las partes en conflicto se acusaron de violar el armisticio.
Ereván sostiene que el enemigo lanzó una ofensiva en el sector sur este domingo, cerca de la frontera con Irán; por su parte, Bakú denunció ataques armenios en las zonas de Agdara, Fuzuli, Hadrut y Jabrail.
Además, durante la jornada se escucharon varias explosiones en la zona de Stepanakert, capital de la autoproclamada república de Nagorno Karabaj, cuyos militares afirman haber derribado varios drones azeríes.
Las hostilidades, en las que las partes beligerantes llegaron a usar blindados, artillería, aviación y sistemas de misiles por primera vez desde la guerra de 1992-1994, provocaron centenares de bajas militares y decenas de víctimas civiles.