Los impuestos digitales globales enfrentaron a Estados Unidos y Francia. En julio de 2019 el Parlamento galo aprobó la tasa GAFA (por Google, Apple, Facebook y Amazon), que obliga a estas firmas a pagar un impuesto del 3% de su facturación. Estados Unidos amenazó con responder con una tasa al vino del país europeo.
El debate ha adquirido recientemente aún más atención a raíz de la pandemia del COVID-19, puesto que los gigantes tecnológicos se han beneficiado de los pedidos hechos desde casa durante la cuarentena, señala CNBC.
El pasado 12 de octubre, la OCDE confirmó que no habrá acuerdo este año y advirtió que los países deben alcanzarlo pronto o se arriesgan a dañar aún más la economía mundial.
"El fracaso arriesgaría que las guerras fiscales se conviertan en guerras comerciales en un momento en que la economía mundial ya está sufriendo enormemente", señaló, a su vez, Ángel Gurría, secretario general de la OCDE.
Según la institución, "la ausencia de una solución basada en el consenso podría conducir a una proliferación de impuestos unilaterales sobre los servicios digitales y a un aumento de las controversias fiscales y comerciales perjudiciales, lo que socavaría la certidumbre fiscal y la inversión".
Al mismo tiempo, la organización aseguró que la comunidad internacional había acordado seguir trabajando para alcanzar un acuerdo a mediados de 2021.
La OCDE que aglutina a 37 países destacó que "consiguió un progreso importante en la búsqueda de una solución duradera y consensuada a los desafíos fiscales derivados de la digitalización de la economía".