"Le informé [a Esper] que antes de los finales del año saldremos con un plan", dijo el ministro a la prensa, citado por la agencia Kyodo.
En la conversación telefónica Kishi y Esper también examinaron las cuestiones relativas a los mares de la China Meridional y de China Oriental, el problema de Corea del Norte, la situación en el océano Índico, así como la reubicación de la base militar estadounidense Futenma en la prefectura japonesa de Okinawa.
En junio pasado el Ministerio de Defensa de Japón informó que el país asiático renuncia al plan de desplegar los sistemas antimisiles estadounidenses Aegis Ashore, alegando la imposibilidad de controlar dónde caerán los propulsores de los misiles, lo que podría poner en peligro las zonas pobladas del país asiático.
Japón aprobó el despliegue de dos sistemas estadounidenses Aegis Ashore en su territorio en el año 2017 con el argumento de la amenaza de los misiles norcoreanos. Cada complejo está valorado en unos 890 millones de dólares.
El emplazamiento estaba previsto en el año 2023 en las prefecturas de Akita (noroeste) y Yamaguchi (suroeste) para blindar todo el territorio del país.