"A los impactos globales de la pandemia de COVID-19 se suma la degradación alarmante de la biodiversidad, se necesita urgentemente una alianza global más fuerte, basada en la cooperación y el multilateralismo, para acordar un marco de la biodiversidad mundial post 2020 [que la considere] como un asunto determinante para el desarrollo sostenible", dijo Oquist en la Cumbre de la Biodiversidad convocada por la ONU.
El miembro del Gabinete de Gobierno de Nicaragua expuso que en medio de actual crisis sanitaria, resulta fundamental mantener el equilibrio de los ecosistemas, pues su deterioro provoca nuevas amenazas y riesgos para la salud.
"Nicaragua, país tropical, le da suma importancia a la diversidad biológica y su relación para el bienestar humano mediante su contribución a los 17 objetivos de desarrollo sostenible y a la erradicación de la pobreza", agregó Oquist.
La prioridad de Nicaragua en el tema de la protección a la biodiversidad es la conservación, protección y restauración de los 20 corredores biológicos existentes en su territorio, de unos 130.000 kilómetros cuadrados.
El representante del país centroamericano en el foro mundial llamó a los países desarrollados a cumplir con los compromisos adquiridos en materia de asistencia oficial para el desarrollo, al considerarla como una plataforma crucial para la conservación de la biodiversidad.