Al contrario de la súperluna, la microluna aparece cuando nuestro satélite natural se encuentra en el punto más alejado de la órbita en torno a la Tierra, a unos 405.000 kilómetros de distancia. Eso podría hacerla parecer cerca de un 14% más pequeña, además de menos brillante que una luna llena habitual. Esta micro luna llena será la segunda más pequeña de todas las que podremos presenciar en 2020.
La peculiaridad de esta ocasión reside en que estamos cerca del equinoccio de septiembre, punto que marca el fin del invierno y el inicio de la primavera en el hemisferio sur.