"Creo que el Gobierno tiene la obligación de velar por la seguridad y sobretodo la convivencia. Por lo tanto, si este acto se podía celebrar unos días después, ¿por qué vamos a generar una tensión?", afirmó el ministro en una entrevista con la Radio Nacional Española.
Campo explicó en la radio pública que el Gobierno optó por evitar el desplazamiento del monarca a Barcelona ante la inminente sentencia sobre la inhabilitación del presidente de Cataluña, Quim Torra, y la cercanía del 1 de octubre, que conmemora el referéndum ilegal de independencia de 2017.
"La inminencia de la sentencia, la cercanía del 1 de octubre... hay una serie de cosas que no podemos evitar", manifestó el ministro durante la entrevista, confirmando así que el Rey no acudió a causa de la tensión política en Cataluña.
El responsable de Justicia explicó además que el Ejecutivo trató de retrasar el acto unos días, pero que el presidente del Consejo General del Poder Judicial, Carlos Lesmes, no vio "necesario" aplazarlo.
Varios medios de comunicación publicaron entonces que el propio Felipe VI se puso en contacto con Lesmes tras el acto para disculparse por no haber acudido y para explicar "que le habría gustado estar allí".
Ante estas informaciones, el vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, utilizó las redes sociales para reclamar al jefe del Estado "neutralidad" política.
Respeto institucional significa neutralidad política de la jefatura del Estado, renovación de los órganos judiciales en tiempo y forma, actuaciones de la fuerza pública proporcionales. Art.1.2CE: La soberanía reside en el pueblo español del que emanan todos los poderes del Estado pic.twitter.com/WnWR0valz6
— Pablo Iglesias 🔻 (@PabloIglesias) September 25, 2020
También se refirió a la llamada del Rey a Lesmes el ministro de Consumo, Alberto Garzón, que tildó de "insostenible" la posición del monarca y le acusó de efectuar una "maniobra" contra "el Gobierno democráticamente elegido".
Los sectores más conservadores de la política española vieron en estas reacciones por parte de miembros del Ejecutivo una afrenta contra Felipe VI.
El líder de la oposición, Pablo Casado, se pronunció sobre los hechos en una entrevista con la cadena Onda Cero donde acusó al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de "complicidad" con los "ataques" contra "la unidad nacional y la Jefatura del Estado".
"Sánchez lleva días sin defender al rey de España, es decir, a todos los españoles que votamos hace 40 años para que la forma de estado fuera la monarquía parlamentaria", subrayó el jefe del Partido Popular en España.
Casado insistió en que el presidente español es un "cobarde" al mantener el silencio y no "dar la cara" para "defender" públicamente del Rey español.