Según los datos de este organismo estatal, en agosto de este año en la Amazonía se detectaron 29.307 focos de incendio, un cinco por ciento menos que en ese mismo periodo de 2019, el peor mes en los últimos diez años, cuando hubo 30.901 focos.
Sin embargo, el vicepresidente brasileño, Antônio Hamilton Mourão, celebró el dato en las redes sociales.
"¡Otro mes más con focos de calor reducidos!", publicó en Twitter.
Mais um mês com focos de calor reduzidos! A diminuição foi de 5,16% em relação a agosto 2019.
— General Hamilton Mourão (@GeneralMourao) September 1, 2020
Proteger, preservar e desenvolver a #Amazônia é desenvolver o #Brasil. 🇧🇷 #ConselhoNacionalDaAmazoniaLegal pic.twitter.com/PsiWpr55qE
No obstante, lo cierto es que en junio y en julio los focos de incendio aumentaron un 19,6 por ciento y un 28 por ciento respectivamente respecto a los mismos periodos del año pasado, por lo que no se puede hablar de varios meses de reducciones.
El elevado número de incendios se produce a pesar de que desde hace meses miles de militares están en la selva amazónica en el marco de la "Operación Verde Brasil 2", que tiene como objetivo frenar los fuegos, la deforestación ilegal y otros delitos ambientales.