Las relaciones entre dos Estados comenzaron entre finales de 2005 y principios de 2006, declaró David Meidan, exjefe de la división Tevel de la inteligencia israelí Mossad y el hombre que estableció los primeros contactos del estado judío con Abu Dabi. Precisó que su unidad era responsable de las relaciones exteriores con organizaciones y Estados con los que Israel no tiene ningún vínculo oficial.
En 2006 el entonces primer ministro israelí Ariel Sharon le encargó al jefe del Mossad establecer lazos con los Estados suníes moderados de la región. El equipo de Meidan tenía que establecer y mantener estos vínculos.
"Literalmente tomamos un mapa y empezamos a examinar los países de la región, analizamos quiénes eran, qué posibles intereses mutuos podíamos tener, y buscamos contactos. Los EAU eran solo uno de esos países en los que nos centrábamos, pero no eran los únicos", reveló Meidan.
Una vez que se encontraron puntos comunes, se empezó la comunicación, primero entre las agencias de inteligencia de los dos países. Los altos funcionarios se reunían de vez en cuando para compartir opiniones. Luego se decidió establecer un canal directo.
"Todo era clandestino y cada lado se aseguró de que nada se filtrara a la prensa", afirmó el exfuncionario.
Los EAU, una nación muy atrevida
Meidan destacó las capacidades políticas de los líderes emiratíes que no tuvieron miedo de ir contra corriente de la coyuntura política del mundo árabe.
"De todos los estados del Golfo, ellos eran los más valientes. Sus líderes son talentosos y experimentados, muy por delante de todos los demás en la región", alabó, al agregar que entendían las ventajas de Israel y daban luz verde a los acuerdos comerciales y de negocios.
"Comprendieron el potencial de Israel y se dieron cuenta de que lo que podemos traerles es bueno para su economía", añadió.
Recordó que Israel nunca ha tenido conflicto bélico con los EAU, así que entre las dos naciones "básicamente no hay mala sangre". Por ende, la paz con los EAU será diferente de la que Israel tiene con Egipto y Jordania con los que el Estado judío tuvo varias guerras.
"El acuerdo de paz con Egipto fue uno de los mayores logros diplomáticos, ya que allanó el camino para que otros países árabes siguieran su ejemplo", destacó el exfuncionario.
"Creo que Bahréin está ciertamente maduro para esto, pero es difícil saber cuánto tiempo les llevará. Después de Bahréin, podría haber otro país, no necesariamente del Golfo", sugirió.
Añadió que luego sería el turno de Omán, Arabia Saudí y Kuwait, ya que a pesar de ser occidentales, les lleva algún tiempo reaccionar a los cambios.
El 13 de agosto Israel y los Emiratos Árabes Unidos acordaron normalizar completamente sus relaciones y establecer vínculos diplomáticos.

Calificado por muchos como histórico, es el tercer acuerdo de este tipo y el primero en más de un cuarto de siglo, tras los firmados por Israel con Egipto y Jordania en 1979 y 1994, respectivamente.