El ministerio informó en un comunicado que "a raíz del bloqueo financiero ejecutado por la Secretaría de Presupuesto Federal en la fecha de hoy (…) se interrumpirán a partir de las cero horas del lunes 31 de agosto todas las operaciones de combate a la deforestación ilegal en la Amazonía, así como todas las operaciones de combate a los incendios en el Pantanal y demás regiones del país".
El bloqueo presupuestario afecta a los dos principales órganos del Ministerio de Medio Ambiente: el Instituto Brasileño del Medio Ambiente (Ibama, la principal herramienta contra los delitos ambientales) y el Instituto Chico Mendes de la Biodiversidad (ICM-Bio, que administra los parques naturales).
Según el ministerio, en el combate a los incendios por parte del Ibama se desmovilizarán 1.346 brigadistas, 86 camionetas, 10 camiones y cuatro helicópteros, y en lo relativo al freno a la deforestación ilegal dejarán de trabajar 77 fiscales y serán paralizados 48 vehículos y cuatro helicópteros.
La decisión no tiene precedentes y llega en un momento muy delicado: en el Pantanal (el mayor humedal de Surámerica, en la frontera con Bolivia y Paraguay) los incendios de las últimas semanas ya han quemado el 10% de su superficie, arrasando entre 1,4 y 1,7 millones de hectáreas, según datos del Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (Inpe).
Este mismo organismo estatal también ha constatado el aumento de los focos de incendio en la Amazonía, la mayoría de ellos provocados para quemar la vegetación arrasada en los últimos meses: entre agosto del año pasado y julio de este año la deforestación aumentó un 34%, afectando a más de 9.100 kilómetros cuadrados de selva.