El níquel y el cobalto son materiales clave para las baterías de los coches eléctricos, detalló el medio. Son, sin embargo, metales caros y difíciles de extraer, por lo que los fabricantes de baterías están buscando alternativas a ellos. Se espera que una batería sin esos elementos sea más barata, lo que, por ende, haría los vehículos eléctricos mucho más asequibles.
Elon Musk, el director ejecutivo de Tesla, llegó incluso a instar a los mineros a producir más níquel, el pasado julio. El magnate puso de relieve que el costo actual de las baterías sigue siendo un gran obstáculo para el crecimiento de la compañía.
Por su parte, Meng no ha dado más detalles acerca del prometedor nuevo producto de CATL, así que no se conoce todavía su densidad de energía, su costo o su autonomía. Se supone que las baterías serán lo suficientemente baratas como para compensar cualquier posible pérdida de rendimiento.
De acuerdo con Reuters, además de la nueva batería sin níquel ni cobalto, CATL trabaja también en una tecnología que posibilite integrarla a la estructura de los vehículos eléctricos para aumentar su autonomía.