La elección del empresario como presidente a finales de 2015 generó "entusiasmo entre los inversores internacionales, que vieron a Macri como un reformador favorable al mercado", indicó el análisis que firman Ramzy Al-Aminey y Tim Willems.
Entre enero de 2016 y junio de 2018, el Ejecutivo de Macri emitió 56.000 millones de dólares de deuda externa, el equivalente al 9% del Producto Interior Bruto (PIB) de 2017, de acuerdo al informe titulado "Sentimiento de los inversores, mala estimación de la deuda soberana y resultados económicos".
El estudio destacó en concreto un bono a 100 años que emitió la gestión precedente.
Préstamo histórico
En estas condiciones, "se hizo cada vez más difícil racionalizar estas condiciones benignas de endeudamiento basadas en los fundamentos económicos existentes, en contraposición a las expectativas sobre los futuros, y pronto la sensación de optimismo se agrió".
Las reformas de Macri, en consecuencia, no trajeron las mejoras inmediatas que los inversores esperaban, lo que llevó a que el país suramericano perdiera acceso al crédito en los mercados internacionales.
El Fondo se comprometió a entregar al Ejecutivo anterior 57.000 millones de dólares, pero finalmente sólo desembolsó 44.000 millones porque al resultar electo el actual presidente, Alberto Fernández, rechazó el resto del préstamo.
Argentina consiguió este mes llegar a un acuerdo con los tres fondos de inversión principales para reestructurar 66.238 millones de dólares de bonos emitidos bajo legislación extranjera.
La negociación con el FMI se retomará en los próximos meses, una vez concluyan las negociaciones actuales con los acreedores internacionales.
