Mauricio Macri vivió su último día como presidente de Argentina. En la última semana usó por primera vez en sus cuatro años de Gobierno la cadena nacional para transmitir un mensaje de 40 minutos en el que destacó lo que considera sus principales logros.
Con algunas reservas, pudo resaltar que, desde 2015, la generación de energías renovables (sobre el total de las fuentes) subió de 2 al 8 % por ejemplo. Además, destacó el aumento de 60 % en la cantidad de personas que viajan en avión gracias a los precios accesibles de las aerolíneas de bajo costo; y que cuatro millones más de niños reciben la Asignación Universal por Hijo (AUH).
Negri, docente e investigador de la Universidad Nacional de San Martín (Unsam), explicó que el Gobierno de Macri decepcionó en todos los indicadores socioeconómicos con promesas incumplidas en casi todas sus consignas de campaña.
Pero, además, se frustra al tropezar con la propia vara autoimpuesta, con metas inauditas como "pobreza cero", para luego llevar al 40 % del país por debajo de esta línea; decir que iba a bajar en tiempo récord la inflación, que pasó de 25 al 50 % anual; o liberar el tipo de cambio, para que el peso acumulara en cuatro años 540 % de devaluación.
"Tal vez el rasgo más sobresaliente de este fracaso es el discurso tecnocrático, que hacía creer que se venía una gestión más efectiva", analizó Negri, especialista en Instituciones Políticas Comparadas con énfasis en burocracias públicas.
La continuidad más allá de Macri
"De su principal legado, si uno piensa un poco más estructuralmente, lo que me parece más notorio tiene que ver con la creación de un partido de centro-derecha competitivo en Argentina, que aún cuando se va mantiene un 40 % de apoyo electoral. Se está recreando esa especie de bipartidismo que caracterizó al país en la década del 80 con peronistas y radicales", evaluó.
Respecto a la autodescripción del Gobierno como defensor de los valores republicanos, de la división de poderes y la independencia de la Justicia, Negri aseguró que es importante matizar, ya que hubo tanto aciertos como desatinos.
El analista recalcó la importancia del rescate del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) como fuente de datos confiables y fidedignos, luego de que fuera intervenido en los últimos años de la Presidencia de Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015), una medida fuertemente criticada por todo el arco político y que llevó a gran parte de la pérdida de credibilidad del Gobierno de la actual vicepresidenta electa.