"Apruébase el Procedimiento para la Reestructuración de los Títulos Elegibles emitidos bajo Ley de la República Argentina", señala la Resolución 381 publicada en el Boletín Oficial.
Los acreedores de Letras y bonos del Tesoro cuyos activos tengan caducidad entre 2019 y 2023 pueden seleccionar otros títulos en dólares siempre que sean emitidos bajo legislación argentina.
Los vencimientos de esos nuevos bonos se establecieron en 2030, 2035 y 2041.
La Secretaría de Finanzas, bajo la órbita del Ministerio de Economía, estableció como fecha de aceptación temprana el 1 de septiembre, aunque el plazo de adhesión estará disponible hasta el 15 de septiembre.
Los que ingresen antes de septiembre recibirán el interés corrido de sus bonos hasta el 4 de septiembre.
"El Ministerio de Economía, a su exclusivo criterio, podrá prorrogar o finalizar anticipadamente el Período de Aceptación Temprana de la Oferta, el Período de Aceptación Tardía y la Fecha de Vencimiento de la Oferta", aclara el Anexo 1 de la resolución.
Política de pesificación
El Gobierno de Alberto Fernández pesificó desde febrero 7.839 millones de dólares a través de la conversión de activos, lo que representa una reducción de 52,4% de la deuda pública de corto plazo en moneda extranjera.

El Gobierno logró a principios de mes un acuerdo por el que los tres principales grupos de acreedores aceptaron canjear sus activos, en el marco de un plan oficial que pretende reestructurar 21 bonos, equivalentes a 66.238 millones de dólares, y cuyo plazo de adhesión vence el 24 de agosto.
La Administración de Alberto Fernández deberá después comenzar otra negociación con el Fondo Monetario Internacional, que prestó al país sudamericano 44.000 millones de dólares entre 2018 y 2019, durante el Gobierno del expresidente Mauricio Macri (2015-2019).