"Está claro que el despliegue de misiles terrestres de medio y corto alcance en varias regiones del mundo socavará gravemente la seguridad regional y global (...) Esto requerirá una respuesta inmediata, independientemente de si los misiles estadounidenses están equipados con armas nucleares o no nucleares", señala el comunicado.
La nota añade que Rusia no podrá ignorar "la aparición de nuevos riesgos de misiles para su territorio".
EEUU, según el texto, anunció su intención de desplegar sus misiles "lo antes posible, principalmente en la región de Asia y Pacífico" y probablemente en Europa.
El Ministerio de Exteriores ruso indicó que las acciones de EEUU llevaron a que ahora no haya restricciones sobre el despliegue de misiles terrestres de medio y corto alcance, y "las amenazas a la seguridad y la estabilidad mundiales se hayan multiplicado".
Sin embargo, el texto añade que Rusia está abierta al diálogo constructivo con EEUU para reforzar la estabilidad estratégica y la seguridad internacional, pese a las acciones de Washington.
"Estamos convencidos de que el único paso adicional razonable y justificado es la búsqueda conjunta de una solución mutuamente aceptable a la situación actual por métodos políticos y diplomáticos", dice la nota.
El 2 de agosto de 2019 la Casa Blanca rompió el Tratado INF, suscrito con la URSS en 1987.
"Seguimos creyendo que Washington ha cometido un grave error. A pesar de que el Tratado no era ideal en el ámbito de la seguridad actual, indudablemente promovía la previsibilidad y la moderación en el sector de los misiles nucleares", indica el comunicado.