"Por ahora se han contabilizado 45 policías heridos", dice el comunicado.
Unas 20.000 personas marcharon hoy por las calles de la capital, muchas sin mascarillas y sin respetar la distancia social.
La acción fue intervenida por la Policía ya que los participantes ignoraron las medidas de seguridad, sin embargo hacia la tarde, muchos de los manifestantes se negaron a abandonar las protestas y los agentes procedieron a las detenciones.
Otra acción de protesta, que tuvo lugar en el barrio de Neukolln, contra las deportaciones y el fascismo, se convirtió en disturbios. Los manifestantes arrojaban piedras a la Policía, por lo que quedaron dañados dos autos policiales y la oficina local de un partido.
Se señala que por las protestas en la ciudad fueron desplegados unos 1.100 agentes.