"Es hora de poner en el debate público la cuestión judicial para que podamos tener un mejor Estado de derecho", sostuvo el mandatario desde la sede de Gobierno.
La iniciativa, que será presentada en las próximas horas al Senado, pretende "consolidar una justicia independiente, regida por las mayores normas de transparencia y que desarrolle los proceso con celeridad e independencia", describió Fernández.
El objetivo es "organizar mejor la justicia federal y superar la crisis que afecta la credibilidad y el buen funcionamiento de la justicia federal con competencia penal", sostuvo el jefe de Estado.
El proyecto de ley también espera que se implemente el sistema acusatorio aprobado por el Congreso el año pasado, el cual le cede a las fiscalías la instrucción de las causas mientras que da a los jueces el papel de garantes.
"De una vez por todas digamos nunca más a una Justicia utilizada para saldar discusiones políticas y para eliminar al adversario de turno", pidió el presidente acompañado por el jefe de gabinete, Santiago Cafiero y la ministra de Justicia y Derechos Humanos, Marcela Losardo.
Consejo consultivo
Los integrantes de esta institución cuentan con "sólidos antecedentes académicos y acumulan una experiencia enorme", valoró Fernández al añadir que "tendrán plena autonomía y libertad para recomendar lo que crean conveniente".
Ese consejo tendrá la potestad de analizar el funcionamiento de organismos como la Corte Suprema, el Consejo de la Magistratura —entidad responsable de la administración de justicia— y la implementación del sistema acusatorio.
"No he llegado hasta aquí para defraudar a los alumnos y la alumnas que me oyeron en la universidad pública reivindicar las reglas del debido proceso", aseguró el presidente.
Al acto también asistieron la vicepresidenta de la Corte Suprema, Elena Highton de Nolasco, el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, entre otras autoridades parlamentarias e integrantes del Consejo de la Magistratura.