"Demostraré que no soy responsable ni culpable de los delitos que se me imputan", dijo Lozoya mediante una videoconferencia sobre los cargos de lavado de dinero y haber recibido fondos ilícitos relacionados con una compañía de fertilizantes.
Lozoya, quien se encuentra en un hospital por presentar anemia y el síndrome de Barret tras llegar extraditado desde España a mediados de julio, dijo que fue "intimidado, presionado e instrumentalizado de manera sistemática", aunque no brindó nombres vinculados al caso, informó la revista Proceso en su página web.
Según los reportes de los medios mexicanos, que seguían la audiencia minuto a minuto en sus páginas web, la defensa del exfuncionario dijo que solicitó a la FGR que le otorgue el criterio de oportunidad, una figura legal que permite que el acusado opte por la reparación de los daños ocasionados a cambio de identificar a otras personas vinculadas al caso.
Lozoya dirigió la petrolera de diciembre de 2012 a febrero de 2016, durante el mandato del entonces presidente Enrique Peña Nieto (2012-2018).
Lozoya fue detenido por la policía de España en febrero de este año, en la exclusiva residencia La Zagaleta, Málaga, en la Costa del Sol española, cumpliendo una orden judicial de mayo de 2019.